martes, 6 de noviembre de 2012

32 equipos - 32 notas: NFC


NFC ESTE
NY Giants – Record 6-3 (2-2 en la NFC Este)
La resaca post-titulo parece no ser un tema (al menos no como en 2008). Una extraordinaria primera mitad defensiva que se resume en 24 robos de balón, tiene a los Giants en la cima de la división más inconsistente de la liga. Los Giants se sostienen en el oportunismo de su defensiva y en el despertar de las siestas ocasionales de su ofensiva. La segunda ofensiva total más productiva de la liga, ha demostrado que juega a nivel elite cuando es necesario. Aunque también han demostrado que pueden perder partidos increíbles. Sus derrotas, aunque solo dos, han sido contra rivales divisionales: en el inaugural contra Dallas y en la semana 4 contra Philly. Las victorias en la división fueron, ambas, por menos de 6 puntos. Habrá quien piense que siendo partidos divisionales, esta justificado que los marcadores hayan sido tan cerrados. Pero la realidad es que en esta división no se pueden dormir siestas demasiado prolongadas. Y los Giants han caminado por la cornisa precisamente por querer pasarse en las horas de sueño.
Philadelphia Eagles -  Record  3-4 (1-0 en la NFC Este)
Sobre los primeros 7 partidos de los Eagles en 2012, puede fácilmente escribirse un ensayo sobre lo bizarro, lo disímil, lo desprolijo… y las 3 victorias que de eso salieron. Lo bizarro: los Eagles despidieron a su Coordinador Defensivo luego de la semana 6. Ese coordinador era responsable de la duodécima mejor defensiva de la liga, aunque tenían sus problemas (Philly enfrento a Giants, Lions y Steelers entre las semanas 3 y 5, sin conseguir ninguna captura). Quizá lo más llamativo es que ese coordinador, antes de encargarse de la defensiva, entrenaba línea ofensiva. Y su sustituto, no es quien estableció la única idea decente de ese periodo (Jim Washburn con la Wide-9), sino el entrenador de la peor unidad del equipo: el entrenador de secundaria Todd Bowles. Lo disímil: Philly ha perdido todo tipo de partidos: por paliza, como visitantes y contra el pasador que entregaron por confiar en Vick (por 21 en Arizona); por pocos puntos en partidos que dominaron pero que se fueron como agua entre los dedos por entregas de balón (5 entre Detroit y Pittsburgh, partidos ambos que perdieron por 3 puntos o menos); y palizas de marcador y conceptuales contra equipos infinitamente mejores, al menos en el departamento de la ejecución (por 13 contra Atlanta… en Lincoln Financial Field). Lo desprolijo: 17 entregas de balón (15 de su QB) y un diferencial robos-entregas de -9. Sobre las 3 victorias, debe decirse que tienen un lado positivo (una  fue en el único partido divisional que han jugado) y uno negativo (una fue contra Cleveland). 5 de los 9 partidos que le restan a los Eagles son dentro de la división. Eso los mantiene con vida. El tema es que una de las secundarias mas caras de la liga hace aguas en todos lados. El contrato Vick cada día parece mas un chiste y Andy Reid no genera confianza con sus movimientos.
Dallas Cowboys – Record 3-5 (1-1 en la NFC Este)
En algunos círculos de periodistas se maneja el termino “Overreaction weekend”, para referirse a la semana 1 de la temporada. Tiene sentido mirando a los Cowboys. Le ganaron con cierta autoridad a los Giants en la semana 1 y de ahí en adelante se han desmoronado ante cualquier intento de defensiva decente. Le anotaron 24 puntos a una ofensiva que apenas permite 20 por partido y le permitieron 17 a una ofensiva que anota 29 por partido. 1-3 contra equipos de record positivo, el gran problema de los Cowboys es que tienen el peor diferencial de robos y entregas de la liga (-11). Le pagaron mucho dinero a Brandon Carr y se jugaron mucho para obtener a Morris Claiborne en el draft. El resultado de esa apuesta es que en la semana 8, Dallas tiene apenas 3 INT’s. El problemas quizás no sea el personal en si mismo, pero si la poca profundidad. En sets de Nickel y Dime, Rob Ryan ha tenido que utilizar a Carr como safety, para dejar como esquineros a Mike Jenkins y Orlando Scandrick. La lesión de Sean Lee, probablemente el mejor apoyador de 3-4 para marcar el pase que hay en la liga, solo añade drama a esa secundaria. Lo otro que mata el diferencial de los Cowboys son las entregas. Solo KC tiene peor diferencial de robos y entregas en la liga. Y el 80% de la responsabilidad en esa cifra la tiene Tony Romo. 15 de las 19 entregas de Dallas vienen de Romo. 9 de ellas en los partidos contra Chicago y NY Giants. Solo Carolina, una de las peores defensivas de pase de la liga, no intercepto a Romo este año. Una mala noticia para él, si se tiene en cuenta que en abril del año que viene cumple 33 años. Si este año no consiguen regresar a playoffs, al menos para terminar como en 2006 contra Seattle, es bastante difícil que Jerry Jones considere traerlo de vuelta una vez más.
Washington Redskins – Record 3-6 (0-1 en la NFC Este)
Como se esperaba, han mejorado, pero no lo suficiente. Las noticias son mixtas para los Redksins. Por un lado, pueden decir que el primer año de Robert Griffin III cumple con las expectativas (lo que no significa que ese rendimiento se va a repetir en el futuro). Apenas 3 INT’s en mas de 220 pases intentados, hablan mas que bien de Griffin. Además, le añade 6.8 yardas promedio en 70 acarreos. El problema es el resto del reparto. Los Redskins tienen el cuarto mejor deferencial entregas robos de la NFC con +7 y un total de 14 robos de balón. Ese número sorprende si se revisa que Washington tiene la peor defensiva contra el pase de la liga. Una muestra es que permiten 114 yardas por partido. Buena parte de eso, es responsabilidad de DeAngelo Hall, el esquinero mas sobrevalorado de la liga. Y más allá de los robos, los Redskins no detienen a nadie. Admiten 320 yardas promedio por pase y 130 por tierra. Números particularmente difíciles de digerir, si se tiene en cuenta la apuesta que han hecho los Redskins en el esquema de Jim Haslett. Es mucho el talento que necesitan aun para ser competitivos, especialmente en esta división. La inestabilidad de Eagles y Cowboys podría entregarles algo, pero tendrán que ganar en los enfrentamientos mano a mano.
NFC NORTE
Chicago Bears – Record 7-1 (1-1 en la NFC Norte)
No lo tomen a mal, pero no es lo que parece. Los Bears han tenido uno de los mejores arranques de la última década. Ese arranque se sostiene en una defensiva que, sin lesiones, regreso al altísimo nivel de 2010 (el año de la final de conferencia en Soldier Field). Rankeados 19 contra el pase y 1 contra el acarreo, los Bears siguen haciendo de la Tampa 2 su pan de cada día. El problema es que solo 1 de las 6 victorias de los Bears llegaron contra equipos de record positivo. 11-25 es el record combinado de Panthers, Lions, Jaguars, Cowboys y Rams, 5 de los 6 equipos a los que Chicago les ha ganado este año. La derrota, fue en Green Bay, por 13 puntos y en primetime. Jay Cutler vive menos de la bomba este año que en cualquier otro momento de su carrera. Ese es quizá el ajuste más importante que ha hecho esta ofensiva desde que no la maneja Mike Martz. De hecho, los Bears viven menos del pase este año que en cualquiera de las 2 temporadas de Martz al frente de la ofensiva. Mike Tice le ha dado primacía al acarreo. Eso no ha reducido la cantidad de capturas permitidas (25 en 7 partidos), pero si ha ayudado a que las armas de recepción de pase tengan mejor rendimiento. La adquisición de Brandon Marshall esta pagando dividendos, aunque sean situacionales. De hecho, el pase es situacional en esta versión de Chicago. Difícil pensar que esa formula pueda sostenerse en playoffs en una liga de pasadores como esta. Promedian apenas 196 yardas aéreas por partido. La segunda parte de su temporada debería decirnos mucho respecto a cual es el verdadero lugar de Jay Cutler en la filosofía Tice: Houston, San Francisco, Seattle, Green Bay y Arizona están en su cierre.
Green Bay Packers – Record 6-3 (1-0 en la NFC Norte)
Como en 2010, los Packers mostraron todas las debilidades posibles en las primeras 8 semanas. Con varios lesionados, una línea ofensiva muy poco confiable y un Rodgers que lucio fuera de ritmo las primeras 5 semanas. A diferencia de aquel año, consiguieron llegar a su fecha de descanso con record positivo. Lo importante ahora será estabilizar los lugares de incertidumbre. Los tackles ofensivos al tope de la lista. 10.5 de las 28 capturas permitidas por los Packers son responsabilidad de Marshall Newhouse y Bryan Bulaga. Entre toda la unidad central de la línea ofensiva (TJ Lang, Jeff Saturday y Josh Sitton), permitieron únicamente 4 capturas. El resto de las capturas permitidas, son responsabilidad de alas cerradas o corredores que no cumplieron con sus asignaciones de bloqueo. La temporada de la línea en lo que a proteger el pase se refiere ha sido inconstante. Además de los horrendos partidos contra San Francisco y Seattle (Brandon Mebane puede que les deba unos cuantos votos a Jugador Defensivo del Año), no les ha ido tan mal como los números parecen mostrar. El acarreo sigue sin ser factor en la ecuación ofensiva. Que solo hayan entregado 7 balones hasta ahora habla de lo bien que esta diseñada la ofensiva McCarthy. Del otro lado, las lesiones son un problema. Charles Woodson y Nick Perry son los principales. El novato Casey Hayward tiene 4 de los 10 robos de balón que ha conseguido la defensiva. El numero puede que no sorprenda, pero la defensiva contra el pase ha mejorado, admitiendo 238 yardas aéreas por partido con 26 capturas. A diferencia del año pasado, cuando a esta altura Green Bay lideraba la liga en robos de balón, pero tenia la peor defensiva de pase de la liga.
Minnesota Vikings – Record 5-4 (1-0 en la NFC Norte)
Los Vikes son el mejor ejemplo de lo que una temporada tan pareja puede generar. A diferencia de Chicago, no son consecuencia del calendario. Pero todo lo bueno que han logrado (victoria contra San Francisco), ha perdido cierta legitimidad por momentos poco estables (derrotas contra Washington e Indy). Minnesota esta en la medianía de cada estadística importante de la liga, con excepción de ofensiva de pase. Gran parte de este inicio es responsabilidad del extraordinario año que esta teniendo el que sin dudas es el mejor corredor de la liga: Adrian Peterson. 5.1 yardas por acarreo, demuestran que todo ha vuelto a su lugar: los acarreos de poder norte-sur, los cortes violentos en cualquier dirección y el instinto para explotar las oportunidades en la línea. Se añade a la ecuación la capacidad de playmaker de Percy Harvin, que ha ayudado enormemente a Christian Ponder en su segundo año. Los Vikes tienen la decima ofensiva total, con 340 yardas ofensivas promedio por partido. Aunque ese numero se base en gran medida en las 135 yardas terrestres que promedian por partido. El gran problema de Minnesota es la defensiva. La presión al rival es mas que aceptable (23 capturas), pero apenas han forzado 4 INT’s. Los Vikes pretendieron resolver el problema de su secundaria firmando a Chris Carr y Zack Bowman en el offseason, dos esquineros nominales en Baltimore y Chicago, donde jugaban fundamentalmente ranura y eran más consecuencia del esquema. Ambos fueron cortados y la situación sigue descansando en el mismo personal poco capaz que permitió 4000 yardas aéreas y 34 TD’s por pase en 2011.
Detroit Lions – Record 4-4 (0-2 en la NFC Norte)
Hay equipos que pueden tener un record que no refleja lo bien que han jugado. Para Detroit esa es una verdad a medias. Básicamente porque sus 4 derrotas han sido por un promedio de 6 puntos y 3 de sus victorias han sido por 4 puntos o menos. El tema es revisar la particularidad de cada partido. En las derrotas contra San Francisco, Minnesota y Chicago, el problema fue de ejecución en momentos tope de esos partidos. La derrota contra Tennessee fue la consecuencia de la lesión de Stafford y de un intercambio de puntos frenético que termino en la última posesión del partido. Los Lions han disminuido la cantidad de capturas permitidas (17 a esta altura de la temporada), pero su ofensiva terrestre sigue sin entregar demasiadas rentas. Mikel Leshoure promedia 4 yardas por acarreo en menos de 100 intentos. Precisamente por lo poco que puede depender del acarreo, son la segunda ofensiva aérea de la liga. El gran problema de los Lions es que la mitad de sus derrotas llegaron a lo interno de la división más pareja de la liga. Y aun no han jugado contra Green Bay. De sus rivales de cierre de temporada, solo Arizona tiene record negativo. Y ha quedado demostrado que a los Lions les cuestan los partidos cerrados contra equipos competentes.
NFC SUR
Atlanta Falcons – Record 8-0 (1-0 en la NFC Sur)
La salida de Mike Mularkey ha significado que el responsable del peso en ofensiva sea Matt Ryan. Eso ha coincidido con el declive en el rendimiento de un Michael Turner que ya tiene 30 años y más de 1500 acarreos a cuestas. Este año se ve mucho mas sentido esquemático a la adquisición (y lo entregado) de Julio Jones. Las amenazas a todas las distancias que plantea el personal de los Falcons, los colocan como la ofensiva numero 9 por pase. El costo, ha sido la reducción en las yardas terrestres por partido: de 113 yardas terrestres por partido en las primeras 8 semanas de 2011, han pasado a 95 yardas p/p. Lo compensan con un ascenso importante en los promedios aéreos: de 212 yardas por partido en 2011 a 275 en el mismo periodo de 2012. Ese es el reflejo más tangible de la salida de Mularkey. La ofensiva terrestre y el juego de pase conservador eran las firmas del antiguo coordinador ofensivo. Atlanta es el cuarto equipo que mas entregas de balón ha forzado en la NFL y uno de los 7 equipos que admite menos de 10 puntos a la ofensiva rival en la primera mitad. Es un logro más que importante para el primer año de Mike Nolan. Es sabido que Nolan prefiere últimamente trabajar con esquemas 3-4, pero con los Falcons no quiso forzar el cambio de esquema. La consecuencia no se ha sentido defendiendo el pase, pero el hecho de que la mayoría de los recursos usualmente vayan a defender el pase, la defensa contra el acarreo pierde mucho (137 yardas permitidas por partido). Quizá el único punto débil en el equipo mas solido de la liga hasta ahora. Y no se trata solo de un tema de record, es un tema de esquema y de ejecución de una idea más que arraigada.
Tampa Bay Buccaneers -  Record 4-4 (1-1 en la NFC Sur)
Lideres en defensa del acarreo. Últimos en defensa del pase. Lideres en ofensiva terrestre. A la mitad del ranking en ofensiva de pase. Estos Bucs de contrastes no son obra de Raheem Morris, sino de Greg Schiano. El talento en este equipo parece haber encontrado complementos gerenciales y de terreno para alcanzar el tope de potencial del núcleo actual de jugadores. Las dos adquisiciones más importantes del offseason: Vincent Jackson y Carl Nicks, han rendido al nivel esperado. La mejor demostración de la contribución de Jackson esta en la mejor sustancial del trabajo profundo de Josh Freeman, completa el 25% de los pases que recorren 15 yardas o mas. 13 de los 29 pases de +20 yardas completados por Freeman, han sido en conexión con Jackson. El rendimiento de Nicks tiene su mejor reflejo en la estadística sobre el acarreo que colocábamos hace unas líneas. Antes de ser colocado en lista de lesionados por el resto de la temporada, Nicks no había permitido capturas ni cometido castigos en 7 partidos. El gran problema de los Bucs ha sido marcar el pase. De hecho, más que marcar el pase ha sido lograr generar presión a los pasadores rivales. Tampa es el cuarto peor equipo en capturas este año (11). La lesión de Adrian Clayborn ha impactado tremendamente ese número. La secundaria aun en semejante escenario se ha comportado a la altura, con 10 INT’s. El cambio de Ronde Barber a la zona profunda ha demostrado ser un acierto. La salida de Aqib Talib no generara ningún cambio sustancial en términos de talento, porque los Bucs no habían contado con él este año. El cierre de los Bucs incluye a San Diego, Denver, Philly y ambos partidos contra Atlanta. Aun con las lesiones, deberían poner números que los metan en la pelea por un comodín.
New Orleans Saints – Record 2-5 (1-1 en la NFC Sur)
Nunca lo sabremos, pero aun sin los problemas del offseason, estos Saints iban a tener serios problemas en 2012. ¿La razón? Su defensiva. Jonathan Vilma, el único miembro de esa defensiva que se vio tocado por el escandalo de incentivos por violencia de Gregg Williams, no es Brian Urlacher o Ray Lewis. Es un miembro más importante en el vestuario que en el terreno. Los Saints simplemente no tienen personal para el esquema Spagnuolo. La filosofía Spagnuolo es simple: generar presión única y exclusivamente con los cuatro frontales. En caso de tener que incorporar mas elementos, esos serian apoyadores y no profundos, como acostumbraba Williams. Spags no cree en el Cover 0, Williams vivía del Cover 0. Roman Harper y Malcom Jenkins tenían sentido en el planteamiento de Williams, en la medida que el apoyo en la presión siempre venia de la secundaria. En el esquema Spags, ambos han fallado en mostrar algo que no se les ha visto en los últimos 2 años: capacidad para defender el pase. De hecho, no se le ha visto a ningún jugador de esa zona profunda desde Darren Sharper. El otro tema es la línea defensiva: no hay talento en esa área. Apenas 13 capturas y un miserable numero de INT’s (3), son el karma de esta defensiva. El resto, es simplemente secundario. Los problemas de esta defensiva nunca desaparecieron realmente. Solo se redujeron el año del Super Bowl por la presencia en nomina de una cantidad tremenda de jugadores capaces de cumplir a rajatabla el esquema de presión, coberturas individuales y cortes de balón que difundía Williams. Pero los números demuestran que en la era Brees-Payton, este ha sido el rendimiento promedio. Que hoy se vean peor que antes, tiene que ver con que ya no tienen los jugadores adecuados para el esquema del nuevo coordinador y no tienen una ofensiva que asegure 40 puntos por partido.
Carolina Panthers – Record 2-6 (1-2 en la NFC Sur)
Bienvenidos al segundo año de un scrambler en la era de la especialización del pase. El año pasado, la novedad era un problema cuando a Cam Newton se refería. Si llenabas la caja para frenar las escapadas, te mataba con bombas. Si llenabas la zona media o la zona profunda, el acarreo era un problema. La receta convencional contra los scramblers es la presión por el centro y los espías en la zona de los apoyadores. Además del arte de mezclar tus coberturas en secundaria. El tema es que solo el scouting te da los puntos y momentos específicos en los que debes aplicar cada receta. El primer año de Newton fue su scouting. Ahora los coordinadores defensivos le colocan espías en los flats zona media para evitar no solo las rutas de escape sino también los acarreos. Le entregan ventajas en la zona profunda, pero en ventanas realmente pequeñas. Le están quitando las distancias medias y profundas y dejándole el acarreo por bolsillo colapsados como ultima opción. En ese contexto, Newton no es nada especial. No tiene ni el brazo ni la precisión necesarias para ser un arma profunda consistente. Por eso, los Panthers pasan este año apenas para 229 yardas por partido, después de tener 290 p/p a esta misma altura del año pasado. Pasaron de ser la segunda ofensiva total de la liga para la semana 9 de 2011 a la numero 27. Ese número es consecuencia no solo de la caída del juego de pase, sino también al hecho de que Newton es el mejor corredor de los Panthers. Promedia 5.9 yardas por acarreo. La terrible paradoja creada cuando tu QB es tu mejor corredor y tienes en roster a dos corredores que cobran más de 150 millones de dólares entre los dos, llevo al despido del Gerente General Marty Hurney. Y la caja sigue sufriendo para detener el acarreo. Los Panthers siguen en reconstrucción. Tal como están desde que se fue Jake Delhomme.
NFC OESTE
San Francisco 49ers – Record 6-2 (2-0 en la NFC Oeste)
No solo son el mismo equipo del año pasado. Son una versión mejorada, del equipo del año pasado. Corren mejor, pasan menos y mejor en zona roja, defienden mucho mejor pase y acarreo. Y siguen siendo un equipo que por mucho que sume en temporada regular tiene muy pocas posibilidades de llegar al gran juego. Es poco lo que no se conozca de estos Niners. Corren con mucha más efectividad que el año pasado. Frank Gore promedia 5.4 yardas por acarreo y Kendall Hunter promedia 5 en justamente la mitad de acarreos de Gore. Alex Smith es el pasador que menos pases profundos intento entre los titulares de la liga. La bomba no es opción, ni siquiera con Mario Manningham y Randy Moss en plantel. Lo que ha mejorado es la ejecución en zona roja. Eso los diferencia de la inefectiva ofensiva de 2011. Defensivamente, las estadísticas gruesas (defensiva contra pase y acarreo), puede que luzcan igual, pero la cantidad de entregas forzadas. Tiene eso mucho que ver con la reducida cantidad de capturas (15). Lo que los coloca lejos de aspirar a las 42 que totalizaron en 2011. Si bien es cierto que las capturas no son la estadística que define los niveles de presión de una defensiva, al menos no en todos los casos, para una 3-4 de presión y zona, las capturas dicen bastante. Lo particular respecto a esta defensiva es que pueden generar presión sin que llegue la captura. Lo que si se ha reducido son los cortes de balón. Apenas 12 este año, con una secundaria que aun generando menos entregas, sostiene el buen rendimiento en los números gruesos. El cierre de los Niners no es nada sencillo: Chicago, New Orleans, New England, Seattle y Arizona. Aunque tienen record de 2-0 en la división y de 4-2 en la conferencia, al menos 3 de esos partidos serán buenas pruebas para lo que les espera en enero.
Seattle Seahawks – Record 5-4 (0-3 en la NFC Oeste)
El record positivo tiene una flaqueza importante: el record dentro de la división. Sin embargo, esas 3 derrotas han sido como visitantes y por 6 puntos o menos. Seattle tomo una decisión fuera de lo esperado al darle la titularidad desde el inicio de la temporada a Russell Wilson, en lugar del recién contratado (por buen dinero) Matt Flynn. La apuesta por Wilson ha funcionado en algunas ocasiones (las bombas que mataron a los Pats por ejemplo), pero en general, Seattle es un equipo corredor por naturaleza. El papel de Wilson  ha sido reducir los errores y ejecutar en momentos clave como los partidos contra New England y Minnesota. La defensiva es lo que sostiene a los Seahawks. De las de personal más capacitado para un esquema especifico, la de Seattle es la defensiva más eficiente de la liga. No convierten en entregas de balón lo que generan, pero aun así son efectivos. La secundaria es la cuarta que menos yardas le permite a los receptores numero 1 de sus rivales y son terceros cuando se trata del segundo receptor. El gran trabajo de los esquineros Richard Sherman y Brandon Browner queda allí reflejado. Son terceros con 25 capturas, aunque 8 de esas vengan del MNF contra Green Bay, es un numero mas que respetable. Tendrán que recuperar todo lo perdido en la división en la segunda mitad. La buena noticia, es que tienen record de 3-1 contra rivales de record positivo, en la lista de esas tres victorias están Green Bay y New England.
Arizona Cardinals – Record 4-5 (1-2 en la NFC Oeste)
John Skelton – Kevin Kolb – John Skelton. 4 victorias al hilo de inicio, 3 de ellas por 4 puntos o menos, 1 por 21 puntos. 5 derrotas al hilo, luego de eso: 2 por 7 puntos o menos, el resto por 14 puntos o más. Todo, con esos dos pasadores asumiendo y dejando la titularidad (siempre por lesión). Arizona además ha tenido que lidiar con las lesiones de sus dos corredores titulares, lo que los ha llevado a ser el equipo con el peor promedio terrestre de la liga (apenas 76 yardas por partido). La caída del rendimiento ofensivo del equipo estuvo más relacionada con las lesiones de Beanie Wells y Ryan Williams que con las lesiones de los pasadores. Básicamente porque la línea ofensiva de los Cards es la peor de la liga en lo que a proteger a su pasador se refiere. D’Anthony Batiste y Bobby Massie son la peor pareja de tackles de la liga: 11 y 13.5  capturas permitidas, respectivamente. La lesión en pretemporada de Levi Brown destruyo los planes de línea ofensiva de Ken Whisenhunt. Hoy Arizona esta a merced de una línea que ha permitido casi 40 capturas en menos de 10 semanas, con su tercer corredor como titular y con dos pasadores del montón luchando para establecerse como titulares. Una lastima, teniendo en cuenta el talento y altísimo nivel al que esta jugando su defensiva.
St. Louis Rams – Record 3-5 (2-0 en la NFC Oeste)
San Luis jugo con Arizona en casa en la semana 5, viajo a Miami en la 6, regreso a casa para jugar con Green Bay y luego viajo a Londres para jugar con New England. Que el record en ese periplo haya sido 1-3, tiene que ver con el nivel de los rivales y con la movilización en si misma. El gran problema de San Luis siguen siendo las piezas que rodean a Sam Bradford. Que Danny Amendola lesionándose haya generado una caída significativa en el juego de pase, da una idea del poco talento con el que cuenta el equipo en ese lugar. De hecho, Amendola se lesiono a mitad del partido de la semana 5 contra Arizona y luego de 3 partidos y medio, nadie se acerca siquiera al liderato de recepciones y yardas de Amendola en San Luis. Es un problema que viene de hace dos temporadas y al que la gerencia de los Rams ha dedicado poco o ningún tiempo o recursos. Con la caída en el rendimiento de Steven Jackson solo se incrementa el nivel de exigencia a Bradford y lo entregado para la tarea simplemente no es suficiente.