32 equipos, 32 notas.

Después 3 partidos, es posible evaluar el rendimiento de cada equipo hasta ahora. Veamos…

NFC Este.

-Philadelphia: Kevin Kolb perdió su trabajo. Andy Reid cree que Michael Vick lo llevara a playoffs. Por ahora, el plan parece estar funcionando.

-Washington: 3-4 en proceso de armado. Línea ofensiva con muchos problemas y Donovan McNabb haciendo lo que puede. Lo único extraño a esta altura, es el record.

-NY Giants: El enigma de la división, hasta ahora ha sido un verdadero desastre. Eso suena a respuesta.

-Dallas: 3 semanas sin poder correr explican el nivel de Tony Romo. Más que nunca, la caja de 7 frontales es su principal esperanza.

NFC Norte.

-Chicago: Una ofensiva igual de inestable que la de 2009 se lleva todos los reflectores. La defensiva es la que los mantiene invictos. Estar sanos, es y será lo fundamental en ese costado del balón.

-Green Bay: Sin Ryan Grant, tendrán que encontrar la manera de estabilizar la ofensiva. Especialmente porque los costados de su línea ofensiva no generan ninguna confianza. La defensiva, sigue siendo de elite.

-Minnesota: Mas allá de Brett Favre, su problema es la incapacidad para presionar QB’s rivales. Así, su defensiva es vulnerable. Más que diversificar la ofensiva, la respuesta en volver a 2008. Traducción: volver a Adrian Peterson.

-Detroit: Sin mirar el record, son el equipo que más ha mejorado desde 2009. La línea defensiva es un espectáculo. Jahvid Best tiene las características de un playmaker de nivel. Con Matt Sttaford en los controles, los resultados serán otros.

NFC Sur.

-New Orleans: Como en las últimas 4 temporadas, ganan en festivales de puntos. La línea ofensiva no ha sido tan efectiva como en otras temporadas. Sin embargo, el arsenal aéreo, los mantiene arriba.

-Atlanta: Imposible pensar en pelear la división si Michael Turner no se mantiene sano. La Matt Ryan - Roddy White se ha establecido como la pareja más importante de cualquier ofensiva en la liga.

-Tampa: Mejorar la secundaria es una necesidad. El nivel de Josh Freeman es altísimo. Con poco, Freeman ha hecho muchísimo. Si la defensiva no puede presionar QB’s, el resto del equipo sufre.

-Carolina: El proyecto Matt Moore duro una semana y media. Si quieren que el proyecto Clausen tenga éxito, la ofensiva debe volver a depender de Jonathan Stewart y DeAngelo Williams. Algo que hasta ahora, no ha ocurrido.

NFC Oeste.

-Seattle: Si quieren ver un equipo oportunista, asómense en Seattle. Defensivamente, pocos equipos han aprovechado tan bien los errores de los rivales.

-Arizona: Para Derek Anderson, tener un receptor como Larry Fitzgerald ha sido un regalo del cielo. En las condiciones que se ha dado la pelea por la división, pueden ganarla tranquilamente. Tienen la experiencia que al resto les falta.

-San Luis: En su último partido, mostraron el nivel de una defensiva de Steve Spagnuolo. Sam Bradford, es el típico QB de primer año. Haber ganado como locales por primera vez desde 2006, debe ser considerado uno de los logros más grande de la temporada.

-San Francisco: El desastre que tenía que ocurrir para que no caminaran la división, ocurrió. Se llama Alex Smith. Pocas defensivas de tan buen nivel. El resto, es todo discutible.

AFC Oeste.

-Miami: Como toda defensiva de Mike Nolan, no tardaron demasiado en mostrar buenos resultados. Pero queda la sensación de que algo les falta. Probablemente sea experiencia. En ambos costados del balón, han demostrado el talento que tienen.

-NY Jets: Dos partidos consecutivos de 3 TD para Mark Sanchez son una buena noticia. El resto, necesita tiempo para ser evaluado. Especialmente la secundaria. Que, queda claro, ya no es la mejor de la NFL. Y esa expresión aplica con o sin Darrelle Revis en el terreno.

-New England: Perder a Kevin Faulk (lesión) y Laurence Maroney (cambio), deja a la ofensiva en manos de Tom Brady. La defensiva es un signo de interrogación del tamaño de Gillette Stadium.

-Buffalo: A Chan Gailey le tomo 5 meses decidir que Trent Edwards era su QB titular y 2 partidos decidir que ya no lo quería ni siquiera en el equipo. Como dijo Steve Young “A veces la culpa no es solo de los jugadores”. Por ahora, CJ Spiller es uno de los fiascos más grandes del draft.

AFC Norte.

-Pittsburgh: Después de escribir esta reseña, iré a un pizarrón y, a la Bart Simpson, escribiré sin cesar “Nunca dudes de una defensiva de Dick LeBeau”.

-Baltimore: Los 3 linieros defensivos de los Ravens, son los mejores de la liga. Anquan Boldin ha demostrado que, sin Larry Fitzgerald, es de los mejores de la liga. Lo de Joe Flacco, ha tocado los extremos: o muy bueno, o desastroso.

-Cincinnati: Ver a Carson Palmer, deja claro que el proyecto de los Bengals no irá a ninguna parte con él como QB.

-Cleveland: La defensiva tiene nivel. La ofensiva, es un verdadero desastre. Necesitaran mucho talento para poder competir en esta división. Y eso, probablemente no ocurra hasta dentro de 2 años.

AFC Sur.

-Houston: Alguien en Houston escribió que los Texans eran un equipo bipolar. Han jugado 12 cuartos. En 6 (Vs. Indy y 2da mitad @Washington) se han visto como candidatos al Super Bowl. En los otros 6 (1era mitad @Washington y Vs. Dallas), se han visto como candidatos, pero a la selección 1 del draft 2011.

-Indianapolis: Peyton Manning y Tom Moore los Colts, demostraron que adaptación es la clave de su éxito. Como dirían en el sur del continente, “no comen vidrio”. Defensivamente, dieron un penoso espectáculo en Reliant Stadium. Si ese fue su peor partido de la temporada, eligieron un buen momento para tenerlo.

-Tennessee: El paso detrás de Indy y Houston que sospechábamos que tenían, lo corroboraron en este tiempo. Detengan a Chris Johnson y el resto es sencillo (otra lección del genio LeBeau).

-Jacksonville: Buffalo, Detroit y Tampa se han visto mucho mejor que los Jaguars. Nada que mostrar en ninguno de los costados del balón. Intentar extender el experimento David Garrard, ha dado terribles resultados.

AFC Oeste.

-Kansas City: ¿Recuerdan a los Broncos de 2009? Estos Chiefs tienen menos armas que aquel equipo. Que el resultado sea el mismo, esta 50-50 en las encuestas.

-San Diego: La época en la que los Chargers eran candidatos en la AFC, es parte del pasado. Con poquísimas armas, tendrán que remar para pelear la división.

-Oakland: Buen ataque terrestre y una defensiva que parece estar en nivel hacen de este uno de los equipos cuyo record, no refleja su rendimiento. El flip-flop respecto al QB, en un error que tranquilamente pudo evitarse.

-Denver: Verlos hace inevitable pensar que serian mucho más competitivos con Elvis Dumervil. La defensiva mantiene el nivel. Pero la ofensiva tiene muy poco con que trabajar.

Semana 3: La frontera...

Comenzar 3-0 no asegura nada. El mejor ejemplo son los Broncos de 2009. Pero comenzar 0-3 es estar al borde de una temporada perdedora y/o sin playoffs. Por eso, la semana 3 para los equipos en 0-2 (Dallas, Minnesota, Detroit, Carolina, San Francisco, San Luis, Buffalo y Cleveland), es crucial. Es el la línea limítrofe entre una temporada con problemas que se pueden solucionar (1-2) o un fiasco (0-3). Veamos…

-Los Niners van a Kansas con la imagen aun fresca del increíble partido que perdieron el lunes contra los Saints. Algo quedo claro en las 2 derrotas de San Francisco: su defensiva ha estado al nivel de las expectativas creadas. No es muy difícil encontrar el punto en el que tendrán que trabajar para ponerse 1-2. Reducir las entregas es el nombre del juego para los 49ers. Y eso para los Niners significa reducir el contracto de Alex Smith con el balón. Smith ha lanzado solo 1 TD y 4 INT en lo que va de temporada. Sus dos intercepciones contra Seahawks y Saints fueron en situaciones clave del partido. Y después de series largas. Darle el balón a Frank Gore ha demostrado ser la vía para que las cosas ocurran en la ofensiva de San Francisco. Gore ha sido especialmente efectivo en acarreos por el centro de la línea. Kansas es uno de los 2-0 sorpresivos del inicio. Su defensiva contra el acarreo y su buen ataque terrestre los han traído hasta aquí. Que Matt Cassell reciba presión de la 3-4 de San Francisco es más que esperable. El trabajo de los Niners debe centrarse en detener a Thomas Jones y Jamaal Charles. Especialmente a Charles que ha demostrado que puede ser devastador en muy pocos contactos con el balón. Si los Niners logran parar el acarreo efectivamente, tendrán buena parte del trabajo hecho. En ofensiva, el partido pasa, como decíamos más arriba, por reducir las entregas.

-Si hay un equipo de arranque 0-2 en problemas, esos son los Dallas Cowboys. No solo han perdido contra dos rivales que consideraban inferiores al inicio de la temporada, no solo han tenido problemas con su línea ofensiva, su juego terrestres o su secundaria, sino que, para remate, van a Houston a enfrentar a los mas que inspirados Texans. El problema de los Cowboys va más allá de su línea ofensiva (permiten mucha presión, pero solo han admitido 1 captura). Su incapacidad de establecer el juego por tierra (promedian 70 yardas terrestres en 2 partidos) ha afectado el rendimiento de Tony Romo. Decíamos en la previa de la temporada, que la razón del éxito 2009 de Romo, era lo explosivo de su juego por tierra. Cuando los Cowboys no pueden correr, la presión sobre Romo se hace incesante. Y en esas situaciones, Romo es aun un pasador del montón. El regreso de Marc Colombo es un alivio para la línea ofensiva. Pero enfrentaran a un Mario Williams que está teniendo su mejor inicio de temporada como profesional (4 capturas y 8 presiones al QB). Sea Colombo o Doug Free el tackle al que le corresponda Williams, no es buena idea que sea solo 1 jugador el que lo marque. Esta será la primera prueba real para los Texans en lo que se refiere a defensiva terrestre. Si los Cowboys quieren exponer algo de la defensiva de Houston, ese algo debe ser la defensa del acarreo. Para la ofensiva de los Texans, será su primera prueba sin su tackle izquierdo Duane Brown (suspendido 4 partidos por violar la política NFL de sustancias prohibidas). Eso es una mala noticia, especialmente considerando que lo mejor de los Cowboys es su caja de 7 frontales. Si la línea ofensiva puede sobreponerse a la ausencia de Brown, Matt Schaub podrá exponer el punto débil de la defensiva de Dallas: la secundaria. Los Texans buscan comenzar 3-0 por primera vez en la historia de la franquicia.

-En cualquier otra temporada, arrancar 0-2 e ir a Detroit, significaría recuperación instantánea. 2010 no es igual, al menos no para los Lions. Tanto ofensiva como defensivamente, son el equipo que más ha mejorado desde 2009 (y 2008, 2007, 2006…). Eso es un factor a considerar para los Vikes. Minnesota llega a Detroit como un equipo con problemas multiples. El bajo nivel de su QB, los problemas con sus receptores y la imposibilidad de poner presión al QB rival consistentemente, son varios de los asuntos que deben tener sin dormir a Brad Childress. Brett Favre viene de mostrar ante Miami una faceta que no había mostrado en Minnesota (pero que en Green Bay y Nueva York conocen bastante bien): la del pasador impreciso y con problemas en el bolsillo. Pero Favre no es el único problema. Contra Detroit, los Vikes tendrán que mostrar capacidad para presionar al QB, especialmente por los costados. Que los 4 linieros titulares de los Vikes tengan solo 2 capturas en lo que va de temporada, es una de las razones de este arranque. Jared Allen y Ray Edwards deben ser capaces de presionar al bastante mediocre Shaun Hill. Detener a Jahvid Best es otra clave. No solo desde el backfield. Best es una especie de comodin que hace de todo. Tendran los Vikes que emparejarlo con un safety o un esquinero en las jugadas de pantalla si no quieren pagar las consecuencias. Eso, mas el buen rendimiento de Pat Williams en el centro de la línea para detener el acarreo, deberían bastar para la defensiva de los Vikes. La ofensiva, es otra historia. Brett Favre cometió errores contra Miami cuando los Dolphins fueron a buscarlo. La línea defensiva de los Lions puede imponer mucha presión. Aunque la diferencia fundamental es que la de Miami es una defensiva 3-4. Para Bryant McKinnie y Phil Loadholt será más sencillo detener a alas defensivas clásicas, que a apoyadores rápidos. La línea defensiva de los Lions es igual o mas talentosa por el centro. Establecer el juego por tierra no será sencillo para Adrian Peterson contra Ndamukong Suh y Corey Williams. Sonara a lugar común, pero el juego será de quien domine la línea de golpeo. Tanto ofensiva, como defensivamente.

-Hagan un ejercicio de memoria y recuerden a quienes decían que Mark Sánchez era el próximo Namath después del arranque 3-0 de los Jets en 2009. Con varios puntos en común, esta semana se hablo mucho del buen rendimiento del QB ante los Pats. Su mejor partido como profesional (3 TD), merecía semejante reconocimiento. Pero, siendo absolutamente honestos, la secundaria de New England es una invitación a recibir esa clase de castigo. Contra Miami, será otra historia. Porque entre Pats y Dolphins hay dos diferencias esenciales en la defensiva: filosofía y personal. La defensiva de Miami vive de la presión de sus pass rushers por los costados (Cameron Wake, Koa Misi, Quentin Moses), la de New England, prefiere detener el acarreo antes de cualquier otra cosa. Y el personal de los Dolphins en su secundaria (Jason Allen, Vontae Davis, Sean Smith), es muchísimo mejor que el de los Pats. Retarlos es un riesgo bastante grande (pregúntenle a Brett Favre). Para los Jets, el juego pasa por correr bien el balón en ofensiva y detener el acarreo en defensiva. Si el juego debe pasar por el brazo de Sanchez, los Jets estarán en un serio problema. Por su parte, Miami debe reducir los errores. Pudiendo ganar tranquilamente en el Metrodome la semana pasada, sus errores (entregas en ofensiva) los metieron en problemas. Estar más de 30 minutos en el campo para su defensiva no es nada recomendable. Al menos no por dos partidos consecutivos. Miami tuvo problemas para detener el acarreo contra Minnesota, especialmente en la segunda mitad. El juego de pase debe comenzar a funcionar. Chad Henne debe poder establecer respeto por aire. Si logra eso contra la secundaria de los Jets, obtendrá una cuota de respeto importante. Presionar al QB e imponer su ofensiva por tierra, son las claves para Miami.

-Jay Cutler debería hacer un ejercicio similar al de Mark Sanchez y no pensar que su actuación de la semana pasada, es reflejo de lo que vendrá. Porque, entre otras cosas, la presión contra Cutler no disminuyo contra Dallas. Lo presionaron tanto o más que contra Detroit en la 1. La diferencia volvió a estar en la secundaria. Cutler supo explotar las debilidades de la secundaria, contra una caja que cuando lo presiono, supo llegarle. La de Green Bay debe ser de las defensivas más completas de la liga. Con capacidad de presión por el talento de Clay Matthews y compañía, el esquema le da primacía a la secundaria. Así, no será tan sencillo para Cutler encontrar fisuras. El trabajo de Chicago debe ser encontrar la manera de hacer efectivo su juego por tierra. Matt Forte ha sido más importante en jugadas de pantalla que acarreando el balón. Defensivamente, los Bears deben aprovechar el emparejamiento favorable de Julius Peppers (sea contra Chad Clifton o Mark Tauscher, Peppers lleva ventaja). Deberan considerar los Packers si quieren al poco confiable Clifton frente a Peppers o al novato Bryan Bulaga. Para Green Bay, los Bears son el primer examen interesante para su ofensiva sin Ryan Grant. La secundaria de Chicago ha mostrado un buen nivel y Aaron Rodgers deberá trabajar bajo presión si los Packers no resuelven el asunto de sus tackles. Especialmente el izquierdo que esta entre Bulaga y Clifton.

Previas en poco espacio…

-Si los Falcons quieren ganar alguna vez en la era Brees la AFC Sur, deben comenzar por ganarle a los Saints.

-El primer partido de Jimmy Clausen como titular en la NFL, es contra un set de esquineros de alto nivel. Para Cincy, es un partido más difícil de lo que parece.

-Titans y Giants necesitan ganar por una simple razón: perder es comenzar a alejarse en su división. Y ambas están bastante abiertas.

-Baltimore va a terreno peligroso contra Cleveland. Es una buena defensiva la de los Browns. Si Joe Flacco sigue cometiendo errores, puede pasar cualquier cosa.

-El año pasado, Peyton Manning tuvo su peor partido contra los Broncos en Indianapolis. Sin Mike Nolan o Elvis Dumervil, estos Broncos representan un peligro menor en comparación con aquellos. Aunque se juegue en Invesco Field.

-En un choque de necesidades, Oakland y Arizona definirán quien arranca 2-1 y quien 1-2. En divisiones tan abiertas como el oeste de ambas conferencias, 1 juego no define mucho, pero un buen arranque sí.

Resumen: Semana 2.

-Lo de Joe Flacco pasó de gris contra los Jets a gris oscuro contra los Bengals. La falta de precisión del QB de tercer año es algo particularmente extraño. Me atrevo a decir que en sus primeras dos temporadas, nunca se le vio tan impreciso en un periodo tan prolongado como en estos dos partidos. Parte de la responsabilidad la tiene su línea ofensiva, en especial el costado izquierdo. Michael Oher y Ben Grubbs han tenido problemas de distinta índole en las primeras dos semanas. Pero han sido medianamente consistentes protegiendo el pase. Sus problemas vienen con el acarreo. Sufrieron de lo lindo a Jason Taylor y esta semana se vieron en problemas contra Antwan Odom. La presión contra Flacco, la incapacidad de los Ravens para establecer el acarreo (Ray Rice tiene 130 yardas en 37 acarreos) y la imprecisión de Flacco (4 intercepciones contra Cincy), dejan este resultado. Los Ravens están 1-1 gracias a su defensiva (la presión que imponen los 3 frontales de la línea defensiva es altísima). Y para los Bengals las primeras dos semanas dejan más dudas que certezas, especialmente en la ofensiva. Solo en la segunda mitad fueron capaces de descifrar la secundaria de los Pats y ahora contra los Ravens, Carson Palmer mostro que la necesidad de mantener felices a Ochocinco y Owens va a terminar siendo un problema. Siempre que le nieguen a esos dos receptores, Palmer sufre en el bolsillo. Los Bengals se sostienen en su muy buena presión al QB. Pero, hasta ahora, es muy poco lo que pueden decir ofensivamente.

-Los Cowboys encontraron la manera de perder contra un equipo que tuvo 1 de 11 en tercera oportunidad, 22 jugadas menos y 7 minutos menos de tiempo de posesión. Aun con esos números, que Chicago este 2-0 y Dallas 0-2 es un acto de absoluta justicia. La línea de los Cowboys mejoro un poco con el regreso de Marc Colombo. Pero los problemas del resto de la línea de Dallas se mantienen. Y con esos problemas Tony Romo ha vuelto a ser el pasador inestable y con poca confianza de inicios de su carrera. Sin poder establecer el juego por tierra (Dallas corrió solo 36 yardas el domingo) y presionado hasta más no poder (Julius Peppers sigue siendo la principal fuente de presión en la línea defensiva de los Bears: 5 presiones, 1 hit y 2 pases desviados), Romo perdió precisión, lanzo 2 intercepciones y erro pases en situaciones importantes. Hoy en Dallas extrañan a Flozell Adams y se sostienen en su buena caja de 7 frontales defensivos. La secundaria de los Cowboys entro a esta temporada como su más importante debilidad defensiva. Y el domingo Jay Cutler (3 TD) se encargo de dejarlo claro. Anthony Spencer, DeMarcus Ware y Marcus Spears fueron los principales protagonistas de la presión sobre Cutler. Cuando la línea ofensiva le dio suficiente tiempo a Cutler (cosa bastante rara), el QB fue capaz de exponer a la secundaria de Dallas. Que Johny Knox y Devin Hester fueran los principales receptores de Chicago, es una evidente demostración del bajísimo nivel de la secundaria de los Cowboys.

-Que la línea ofensiva, el juego de pase, el juego por tierra, el QB y, a tales efectos toda la ofensiva de los Steelers sean un reverendo desastre, no impide que estén 2-0 ¿Por qué? Porque los Steelers son un equipo contra histórico. No solo ganaron 2 Super Bowl en base a defensa y creaciones espectaculares de su QB, sino que esta temporada tienen toda la intención de volver a hacerlo. Desde que perdieron a Willie Colon (nada fastuoso, pero por mucho su mejor liniero ofensivo), se sabía que la línea de los Steelers tendría problemas. Ante un equipo como los Titans, los problemas de la línea ofensiva no deberían ser tantos. Sin embargo, cualquier línea defensiva es una aventura para los Steelers. Trai Essex y Chris Komoeatu han estando simplemente nefastos. Que Maurkice Pouncey (novato) y Flozell Adams hayan sido los más estables de esa línea ofensiva, no es tanto un halago como una declaración de lo mal que han estado el resto. Pero Pittsburgh tiene la defensiva más dominante de la liga. Su cuerpo de apoyadores no es solo talentoso, está lleno de playmakers. Lamarr Woodley, Lawrence Timmons y James Harrison se combinaron para 3 capturas, 7 hurries y 1 intercepcion. La buena actuación de la caja de los Steelers se resume en 2 hechos: solo 34 yardas por tierra para Chris Johnson y la sustitución de Vince Young como QB de los Steelers luego solo 14 dropbacks. El primer TD que permitió esa defensiva, llego en el último cuarto de su segundo juego. Mas alla del nulo rendimiento de su ofensiva, los Steelers se las han arreglado para estar 2-0. Todo se explica desde su defensiva.

-En septiembre no se gana nada. Pero puede perderse mucho. En el Metrodome, los Dolphins ganaron uno de esos partidos que ambos equipos recordaran en diciembre. Decir que Brett Favre no es el mismo de su mejor época, no es descubrir nada. Decir que los Vikings tienen problemas más allá del nivel de Favre, si es noticia. Los Vikes son un equipo que descansa en dos pilares fundamentales: el juego por tierra en ofensiva y la presión al QB rival en defensiva. Ninguna de las dos ha sido efectiva en el inicio de la temporada. O, al menos, no han generado resultados. Cuando Adrian Peterson toca el balón, las cosas comienzan a ocurrir para los Vikes. Sea recibiendo pases o acarreando el balón, Peterson se parece cada vez más al jugador que en 2008 cargo a este equipo hasta el playoff (con Tarvaris Jackson como QB). La línea ofensiva de los de Vikes está diseñada para proteger el acarreo. Y se nota cuando Peterson hace lo suyo. Favre recibió presión constante de una 3-4 que fue una fotografía de su coordinador: Mike Nolan. Koa Misi, Quentin Moses y Cameron Wake pusieron en problemas a Favre toda la tarde. Forzaron un balón suelto en zona roja y el resto del trabajo lo hizo la secundaria. Cada vez que Favre intento asumir riesgos, lo pago. Las 2 intercepciones de Jason Allen, son pases mal lanzados por Favre. Sumen a eso la genial presentación de la línea ofensiva de los Dolphins (Jake Long redujo a Jared Allen a su mínima expresión) y tienen el resultado. Aun asi, Miami tuvo que sufrir por errores de su ofensiva para ganar este partido. Quedo demostrado que la ofensiva tiene que ponerse al nivel de la defensiva si los Dolphins quieren ser consistentes. Para Minnesota, la temporada pasa por replantear muchas cosas. Lo que más debe preocupar es que están 0-2 sin haber enfrentado a ningún rival divisional. Lo más difícil de la temporada, apenas está por venir para los Vikes.

-Si el karma existe, hoy pocos fans lo sufren tanto como los de los Patriots. Porque, como nunca en la última década, los Pats se parecen a ese equipo del que siempre se mofaron por tener buen juego de pase y poco más: los Indianapolis Colts. New England es un equipo de secundaria joven, de nulo juego terrestre, con buena caja y con una única esperanza: Tom Brady. La única diferencia entre la victoria contra los Bengals en la 1 y la derrota en NY de la 2, son los errores de Brady. Cuando el QB de un equipo en estas condiciones comete errores, pueden olvidarse de cualquier posibilidad. Brian Schottenheimer aprovecho la posibilidad darle libertad a Mark Sanchez ante una de las secundarias menos talentosas que enfrentara esta temporada. Sánchez asumió el reto y tuvo su mejor partido como titular de los Jets (3 TD). Para los Jets, la respuesta a la pregunta ¿Qué versión de Antonio Cromartie tendremos el domingo? Llego en la segunda mitad, justo en el momento en que mas lo neceistaban. Cromartie domino físicamente a Randy Moss cuando Darrelle Revis se lesiono. Brady insistió en probarlo, y lanzo dos intercepciones. Wes Welker fue trabajado en comité por Kyle Wilson y Dwight Lowery. Los Jets no hicieron nada del otro mundo defensivamente. Especialmente porque estos Pats exigen poco las distintas facetas de una defensiva. Si hay presión y buena secundaria, estas cubierto. Sera una temporada larga para los Pats si no consiguen solventar la debilidad de su perímetro.

Notas…

-Aun con el 0-2 del arranque, los Lions son el equipo que más han mejorado desde 2009. Serán un equipo difícil dentro de su división (mala noticia para los Vikes).

-Los Packers le dieron juego a Bryan Bulaga como tackle izquierdo en la segunda mitad de la victoria contra Buffalo. El lunes, reciben a Chicago. ¿Chad Clfton Vs. Julius Peppers? Mmmm...

-Ver trabajar a Josh Freeman da gusto. Tiene la confianza de un QB de 5to año.

-Los Panthers convirtieron a su esperanza post-Delhomme en el chivo expiatorio de sus desgracias. Afuera Matt Moore, adentro Jimmy Clausen.

-Seattle demostró que la victoria contra San Francisco fue toda culpa de los niners.

-Los Raiders tardaron solo dos semanas en autodestruirse. Sufrieron para ganarle a San Luis y establecieron una polémica innecesaria alrededor de su QB titular.

-Washington perdió un partido increíble. De esos que pesan en diciembre. Especialmente cuando juegas en una división como el este de la NFC.

-Los Colts volvieron a ser el equipo de la defensiva que se dobla pero no se rompe.

-Los Niners son los padres de la autodestrucción. Si estaban 2-0 en lugar de 0-2, nadie podria discutirlo.

El dato: los Jets ganaron apenas su quinto partido cuando Mark Sánchez intenta más de 20 pases (5-8). Además, New England se convierte en el primer equipo al que Sánchez le gana dos veces como QB titular.

Semana 2: Semana de tazones.

Bienvenidos a la semana 2. Semana de tazones: el del odio (Pats@Jets) y el de los Manning (Giants@Colts).

La defensiva de los Steelers va a LP Field. Si nos dejamos llevar por la semana 1, los Steelers tuvieron un mejor calibrador que los Titans (dicho con todo el dolor de mi fanatismo por los Raiders). Sera lindo ver a Chris Johnson correr contra la 3-4 de Dick LeBeau (el acarreo más largo de Michael Turner en la semana 1 Vs. Pittsburgh fue de 7 yardas). Jason Campbell es un pasador de mejor nivel que Dennis Dixon y por mucho. La defensiva de los Titans no solo capturó 4 veces a Campbell, también lo interceptaron 1 vez. La línea de los Steelers está precedida por su nefasto curriculum del último tiempo. A eso se suma la ausencia de su tackle izquierdo titular Max Starks. Pequeño detalle: los Raiders corrieron 136 yardas contra Tennessee. Si los Steelers deciden reducir el contacto de Dixon con el balón, el papel de Rashard Mendenhall será clave. En cualquier caso, todo el armado de los Steelers pasa por reducir al mínimo el rendimiento de la ofensiva rival. Si Vince Young recuerda como vivir fuera del bolsillo, deberá ponerlo en práctica el domingo. Si los Steelers logran poner el juego en el brazo de Young, tendrán buena parte de la batalla ganada.

Los Vikes reciben a Miami en uno de esos partidos bisagra. 0-2 y 1-1 no lucen igual en una división como el norte de la NFC. La primera prueba de fuego para la recién estrenada 3-4 de Mike Nolan, será contra una línea ofensiva que no se ha visto bien contra 3-4 definidas como la de Miami (si contra híbridos como el de Dom Capers). Bryant McKinnie se lesiono un dedo de la mano derecha la semana pasada ante New Orleans. Eso, mas el buen rendimiento de Cameron Wake en la 1 Vs. Buffalo, hacen prever un buen duelo por el costado izquierdo de la línea ofensiva de los Vikes (aun sin Jared Odrick jugando). Para Miami el nombre del juego es acarreo. Chad Henne no es precisamente el QB que debería encargarse de exponer los problemas en la secundaria de los Vikings. Correr sostenidamente contra Pat Williams puede considerarse peligroso. Joe Berger inicio la semana pasada como centro y su trabajo fue bastante bueno. Necesitaran los Dolphins un rendimiento superior si quieren tener éxito en correr por dentro de la línea. La clave para Miami estará en el éxito que puedan tener corriendo. La clave para los Vikes, será que tan alto sea el rendimiento de su línea ante las constantes cargas de la defensiva de Miami.

Cincy es uno de los equipos con más apremio por ganar en la semana 2. No solo perdieron por paliza en Foxborough en la 1, reciben en la 2 al principal candidato para ganar su división: Baltimore. Lo que más debe preocupar a Marvin Lewis, es el pobrísimo nivel de su defensiva contra el pase. Fue ese el punto más alto de la defensiva de los Bengals en 2009 (al menos desde la lesión de Antwan Odom). Contra los Pats, Leon Hall y Jonathan Joseph fueron incapaces de detener en momentos clave del juego a Randy Moss y Wes Welker. Esta semana tendrán que verle la cara a Anquan Boldin y TJ Houshmandzadeh. Para Baltimore, será clave que Joe Flacco retome su precisión de donde sea que la haya dejado en la semana 1. Flacco fallo pases increíbles contra los Jets y se enfrentara a una secundaria casi tan peligrosa como esa. Michael Oher y Ben Grubbs sufrieron de lo lindo contra el veterano Jason Taylor, especialmente en jugadas por tierra. La de Cincy es 4-3, pero Antwan Odom es peligroso. Seguramente les irá mejor a ambos. Pero será una batalla interesante. Algo con lo que puede contar Carson Palmer, es que recibirá más presión de parte de los Ravens que la impuesta por los Pats. Baltimore demostró que sus 3 linieros se bastan para presionar a cualquier QB y línea ofensiva de la liga y su secundaria tuvo un buen rendimiento ante Mark Sanchez. Aunque no fue tan presionada como se esperaría.

Cuando Tom Brady dijo que odiaba a los Jets, seguramente muchos comenzaron a esperar el juego del domingo. Si para los Bengals es importante ganar, para los Jets es poco menos que obligatorio. Perder contra New England significaría: arrancar 0-2, perder contra un rival directo por el cupo a playoffs (que se iría a 2-0) y, lo más importante, perder 2 partidos seguidos en casa. Decir que el rendimiento de Mark Sánchez fue decepcionante es mentir. Si alguien esperaba mejoría de Sánchez en su primer partido de la temporada y contra una defensiva como la de Baltimore, es realmente inocente. Además, Brian Schottenheimer acepto en la semana que había asumido pocos riesgos enviando jugadas ofensivas, especialmente en la segunda mitad. Pretender reducir los riesgos al darle el balón a Sánchez, es comprensible. Si la formula Schottenheimer es hacer lo que le dio resultado en los últimos 5 juegos de la temporada pasada, debería comenzar temprano este año e incluir en la formula a Shonn Greene y LaDainian Tomlinson desde el inicio. El domingo, obtendremos respuestas a eso. Para New England, el juego pasa por dos puntos: comprobar hasta qué punto la secundaria de los Jets es vulnerable (sin tomar en cuenta Revis Island, Baltimore se hizo un picnic con los Jets), y definir cuál es la mejor manera de ganarle a los Jets si tu juego terrestre no es efectivo. Para muchos, emparejar a Antonio Cromartie con Wes Welker es una batalla ganada por el defensivo. Y por mucho. Pero, cuidado con lo que deseas. Si el Cromartie que se presenta el domingo es el mismo del lunes anterior, Welker ganara el emparejamiento… Y por mucho. En algun momento de la temporada, Rex Ryan le dará más participación a Dwight Lowery en la secundaria. Verlo el domingo, dependerá de hasta qué punto llevan los Pats el experimento con la secundaria de los Jets.

En la semana 1, Houston intento ganarle a Indy de la manera más difícil posible: combinando una felpa a su defensiva con una felpa a su QB. La primera paliza fue posible, la segunda no. Aun con el desastre de línea que mostraron los Colts el domingo (los tackles Charlie Johnson y Ryan Diem permitieron 2 capturas, 4 hits y 10 presiones al QB), Peyton Manning completo el 70% de sus pases. La preocupación de los Colts debería estar en que enfrentaran a una línea defensiva que se vio muy bien contra el pase en la semana 1. Aunque, siendo honestos, los Panthers no son realmente un parámetro para medir eso. Viendo el asunto desde la perspectiva de los Giants, deben tener en cuenta que presionar a Manning es deber pegarle a Manning. El hijo mayor de Archie Manning no es Matt Moore y no cometerá los errores que cometió el pasador de los Panthers. Si van por él, mas les vale regresar con él. Por su parte, el hijo menor de Archie Manning tendrá frente si una defensiva que demostró todas sus deficiencias en un solo partido. Regresa Jacob Lacey a la secundaria. Si bien Lacey no es santo de mi devoción, tener un buen tres esquineros de mediano calibre siempre será mejor que tener dos. Los Colts deben encontrar la manera de parar el juego por tierra de los Giants. Los Panthers contaron con un gran Dan Connor. Gary Brackett y Clint Session deberán encargarse de detener a los Giants como no pudieron detener a Arian Foster. Eli Manning demostró la semana pasada que sucumbe a la presión. Pero para que esa presión llegue provista por los costados de la línea, los Colts deben detener a los Giants por tierra. En caso contrario, volverá a ser una larga noche para el hijo mayor de Archie Manning.

Previas en poco espacio…

-Si Atlanta no puede con Arizona, alguien en algún lado comenzara a dudar de Matt Ryan.

-Con los problemas que tiene Dallas en la línea ofensiva, será interesante ver como marcaran a Julius Peppers. Especialmente después de lo que le hizo a Matt Sttaford.

-Si alguien en Kansas soñó con arrancar 2-0, debe haber visto más de medio sueño hecho realidad el lunes. No ganarle a Cleveland representa más de un paso atrás.

-La temporada de Detroit termino cuando Julius Peppers castigo a Matthew Sttaford. La de los Eagles, pareció haber comenzado cuando Michael Vick se hizo cargo de la ofensiva.

-Si Green Bay no le gana fácilmente a Buffalo, será por una de las siestas de Dom Capers. Visto lo visto, dudo que los Bills puedan ganarle un partido al Alabama Crimson TIde.

-Que Matt Moore mantenga su trabajo en Carolina, es tan increíble como el partido que gano Tampa en la 1.

-A los Seahawks aplica la misma lógica que a los Chiefs.

-Los Raiders siguen siendo una moneda al aire. Para San Luis, serán una prueba tan dura como Arizona.

-¿Alguien aposto que Houston@Washington sería un duelo de ganadores de la semana 1? Si alguien lo hizo, que avise. Merece un premio.

-Después de lo visto en la semana 1, la clave para los Chargers será clave ejecutar.

-El lunes en la noche, puede comenzar a ocurrir la catástrofe necesaria para que los 49ers no caminen su división.

Resumen de la semana 1.

Tomar la semana 1 como referencia de lo que puede traer el resto de la temporada es hasta cierto punto inocente. Hasta la semana 3 o 4 no estaremos en capacidad de definir las verdaderas capacidades y debilidades de los equipos. Sin embargo, lo bueno de la semana 1 es que permite confirmar cuales de los sospechosos habituales de los equipos siguen estando presentes. Es decir, que jugadores, entrenadores, situaciones y demás se confirman como parte de los equipos y serán parte de su temporada. Con eso en mente, revisemos la semana 1.

En Chicago se dio uno de esos partidos que hacen que los fanáticos de los equipos en disputa sufran, que sus entrenadores tengan problemas para dormir y que los fans neutrales disfruten de un tremendo espectáculo. Lions y Bears se combinaron para 7 entregas de balón, 16 castigos, 2 intentos de fallidos en cuarta oportunidad y un final polémico con decisión arbitral nefasta incluida. Chicago gano un partido que perfectamente pudo perder por sus propios errores y por la desastrosa decisión del final que le quito el TD ganador a los Lions. La línea defensiva de Detroit demostró lo mucho que ha mejorado. 4 capturas, 2 balones sueltos forzados, mucha presión sobre Jay Cutler y un buen rendimiento contra el acarreo. Detroit entro a la segunda mitad con buena parte de la guerra perdida con la lesión de Matthew Sttaford (gracias al primer gran golpe de Julius Peppers en Chicago). Por su parte, los Beras demostraron lo pobre de su ofensiva. Saquenles a Matt Forte, y Jerry Angelo pedirá a la NFL que les entreguen de una vez el pick 1 en el draft 2011. Limitadísimo en armas disponibles, Jay Cutler tuvo un partido nefasto. Sera mucho lo que tendrá que trabajar Chicago si quieren que esta no sea la única victoria en un buen rato.

En Houston, los Texans consiguieron algo que nadie en 2009 (quizás solo los Saints), pudo probar: las limitaciones de la defensiva de los Colts. Muchas veces, al hablar de la defensiva de Indy se decía “se dobla, pero no se rompe”. Los Texans no solo demostraron el punto, le dejaron claro con un énfasis devastador. 355 yardas totales (257 terrestres), dejaron en evidencia algo que en 2009 (y 2008, 2007, 2006, 2005…) nunca se vio, una defensiva endeble que sufrió en grande contra una ofensiva que ya merece un asiento en la mesa de los grandes. Los Colts tienen un serio problema contra el acarreo. Un problema que vienen cargando desde hace rato. El esquema Caldwell de tackles defensivos quedo destrozado el domingo. La línea ofensiva de los Texans hizo lo que quiso contra la caja de Indy. Si, Dwight Freeney y Robert Mathis proveen muchísima presión. Pero cuando corren contra Indy, es Antoine Bethea (un safety) el más beneficiado. Eso dice mucho. Por otro lado, Houston hizo algo que en 2009 no intentaron: alejar el balón de las manos de Matt Schaub en las situaciones difíciles. Errores de Schaub les costaron derrotas dolorosísimas en 2009. No más. Es muy temprano para saber si Arian Foster es o no una realidad. Pero, seguramente, gano enteros con su actuación del domingo. Por último, mucho se hablo de los problemas de la línea ofensiva de Indy contra la presión… Peyton Manning: 40/57: 433 yardas; 3 TD. Háblenle al hombre de esos números sobre esos problemas.

En Pittsburgh se estableció un debate ¿Cómo puede un equipo ser candidato a ganar la división del actual campeón, si no fue capaz de ganarle al 3er QB de otro equipo? La respuesta sonara a excusa, pero Matt Ryan sabe que es certera: la defensiva de los Steelers está de vuelta. Y si esa defensiva fue capaz de llevarlos a ganar 2 anillos en la década pasada (si Ben, acepta que fueron ellos), seguramente podrán soportar hasta recibir algo de apoyo de su ofensiva. Lo que me parece ocurrirá alrededor de la semana 5. Dejando a un lado las ironías, pocas cosas tan gratificantes para los amantes a este deporte, que ver un equipo defensivo de Dick LeBeau ejecutando el libro. No menos de 5 formatos diferentes de presión utilizo LeBeau el domingo. La línea ofensiva de Atlanta (que es buena, pero no de elite) tuvo dos problemas llamados James Harrison y Lammar Woodley. Los apoyadores por los costados de Pittsburgh fueron los principales responsables de la presiona a Ryan. Y el centro de la línea defensiva se encargo de parar el acarreo (el acarreo más largo de Michael Turner fue de 7 yardas). Tener a Troy Polamalu de regreso es un respiro para LeBeau. El domingo se vieron no menos de 7 cargas con 6 elementos, todas terminaron en pases incompletos, dos en capturas a Ryan, 3 en acarreos para perdida de yardas y una casi termina en intercepción. Eso lo aporta Polamalu, la seguridad de cargar en cualquier situación con la seguridad de que la secundaria responderá en el mano a mano. Ofensivamente, los Steelers respondieron a la expectativa y fueron poco menos que nulos. Dennis Dixon no llevara a este equipo a ningún lado. El chico tiene un problema de mecánica que lo convierte en una amenaza más que en una garantía. Y por tierra, es poco lo que se espera de un equipo que ha tenido tantos problemas en ese aspecto en el último tiempo. La espera por Ben y la semana 5 arrancaron bien para Pittsburgh. Para Atlanta es una derrota presupùestada. Especialmente cuando se juega contra una defensiva de ese calibre.

En Washington se dieron los hechos de una película que la gente de Dallas conoce bastante bien: como los Cowboys se las arreglan para perder contra rivales inferiores. Al menos no esperaron hasta diciembre para hacerlo. Las malas decisiones de Jason Garrett, coordinador ofensivo de los Cowboys, condenaron a su equipo. Sumen eso a una línea ofensiva que sufrió contra la interesante 3-4 de los Redskins y tienen el resultado. La adaptación a jugar 3-4 es difícil. Más aun si no tienes un tackle nariz especialista. Jim Haslett intento compensarlo en las situaciones de acarreo con una formación nickel en la que el segundo tackle era Albert Haynesworth. Tendrá que encontrarle solución a medida que avance la temporada. Aunque no es sencillo encontrar a un especialista para la posición. Menos formarlo. Ofensivamente, los Redskins sufrieron contra una 3-4 de presión constante. Solo el buen rendimiento de su defensiva explica el resultado. Los Cowboys tendrán que definir como ejecutar por tierra. El intento de equilibrar el trabajo entre Felix Jones y Marion Barber (8 acarreos C/U) tiene fecha de vencimiento. Y si algo quedo claro el año pasado, es que Tony Romo es un pasador del monton cuando no tiene apoyo terrestre.

En NY, los Jets arrancaron una temporada donde les toca ratificar todo lo que hablaron en el offseason. Y lo hicieron mal, muy mal. La ofensiva de los Jets no se presento al New Meadowlands Stadium. 1 de 11 en 3eras oportunidades y esa única conversión llego con 57 segundos en el reloj del último cuarto. Mark Sanchez se mostro tan impreciso como a inicios de la temporada pasada, especialmente contra la carga. Los 3 linieros defensivos de los Ravens se bastaron más de una vez para poner presión a Sanchez. Sumen a su mala actuación 14 castigos cometidos por el equipos, 9 por su defensiva, y tienen este resultado. Lo que sorprende de los 9 castigos de la defensiva, es que 7 fueron contra jugadores de la secundaria, 5 contra los esquineros 2 y 3 de los Jets: Antonio Cromartie y Kyle Wilson. Hasta a Darrelle Revs le cobraron uno por holding. Rex Ryan morirá con ese trío, pero en algún momento tendrá que mirar a la banda y mandar a Dwight Lowery por Cromartie o Wilson. Revis Island es solo una pequeña porción de la secundaria de los Jets. Baltimore tuvo problemas con un Joe Flacco impreciso al extremo, especialmente en situaciones clave del partido. Ademas, el estreno de Michael Oher y Ben Grubbs en sus nuevas posiciones de la línea ofensiva no pudo ser menos prometedor. Solo Jason Taylor basto para dejar en evidencia que esa combinación de guardia y tackle tendrá problemas cuando los Ravens jueguen contra defensivas 3-4 (pensar en lo que Pittsburgh puede hacer con ese par debe darle miedo a la gente de Maryland). Con todo, los Ravens tuvieron la confirmación de la buena inversión que es Anquan Boldin. Si Flacco se mostraba más preciso, los Ravens podrían haber ganado tranquilamente.

Otros resultados: Miami gano un partido que tuvo más suspenso del esperado en Buffalo. New England se aprovecho de la defensiva de los Bengals (que no se presento en Foxborough), pero deberían poner el ojo en las 345 yardas que obtuvo Carson Palmer. Los Raiders acabaron con toda la expectativa y dieron un penoso espectáculo en Tennessee. Los Giants ganaron un partido fundamental a unos Panthers que deben estar replanteándose al QB, porque lo de Matt Moore fue muy duro de ver. San Francisco perdió un partido modélico de lo que es su equipo ¿Por qué? Porque todo el equipo estuvo a la altura, menos su QB. Green Bay esquivo una bala en Phily, pero su defensiva demostró que tiene tendencia a dormirse en lagunas interminables que obligan a la ofensiva a esforzarse en demás. Por cierto, y hablando de los Packers, lo de Chad Clifton es pavorosamente malo. No sé cuanto soporte como tackle izquierdo. Pero, teniendo en cuenta a los rivales que tiene Green Bay por delante, no creo que sea demasiado. Al menos, no si los Packers pretenden cubrir los pronósticos.

El dato: La del domingo fue la derrota 62 de Peyton Manning como titular en la NFL. Manning ha sido titular desde su primer día en la liga. En esas 62 derrotas, promedia 258 yardas, ha lanzado 94 TD y 96 INT. Esas 96 INT representan el 53% de las que ha lanzado en su carrera (181) y su promedio de yardas por partido en derrotas, no se aleja demasiado de las 262 que promedia de por vida. El del domingo fue su segundo total de yardas más alto en derrotas de los Colts (433 yardas). El máximo de yardas de Manning en derrotas de los Colts es de 472 Vs. Kansas en 2004.

Hasta la semana que viene…

La nube que puede dañar la fiesta...

Bienvenidos a la temporada 2010 de la NFL.

A partir de la próxima semana, publicare previas y resúmenes de los partidos de cada semana. Pero para arrancar el año, se hace necesario hablar del tema que será la principal preocupación de todos los relacionados a este deporte por, al menos, los próximos 6 meses: la negociación laboral entre liga y jugadores.

Los verdaderamente involucrados a la NFL (desde jugadores, gerentes, periodistas e incluso fanáticos) entienden la gravedad de la situación que podría terminar con una huelga y la imposibilidad de jugar la temporada 2011. Desde el pasado 5 de marzo (fecha de inicio del offseason 2010), quedaba claro que de no llegarse a un acuerdo antes del inicio de la temporada regular, el riesgo de huelga aumentaría a niveles importantes. El actual contrato colectivo (Collective Bargaining Agreement o CBA por sus siglas en ingles) vence el 4 de marzo de 2011. Una de sus clausulas estipula que un año antes de terminar, el tope salarial quedaba eliminado. Esto, como forma de obligar a las partes de negociar.

Las negociaciones entre la NFL y la asociación de jugadores (NFLPA) no solo no llegaron a buen puerto durante el offseason. Ni siquiera han iniciado. Y a medida que avanzan los días las posiciones de ambas partes se van alejando de la posibilidad de un acuerdo. Al menos, en el corto plazo. El mismo 2 de marzo, quedaba clara la manera en que se establecería el ambiente de las discusiones. Ante la posibilidad de iniciar el offseason sin tope salarial, la NFLPA envió un memo tanto a sus agremiados como a sus agentes, pidiéndoles autorización para proponer a la NFL que se mantuviera el tope salarial por al menos un año más. Esto como forma de llevar adelante las negociaciones del nuevo contrato colectivo sin que el asunto salarial fuera un tema que se interpusiera. Los jugadores aprobaron la propuesta y la NFLPA la elevo a la liga. La negativa de los dueños, llevo al primer offseason sin tope o piso salarial desde 1993, a que más de 200 jugadores con 4 años de servicio perdieran la posibilidad de ser agentes libres sin restricciones (sin tope salarial, los jugadores deben tener 6 años de servicio para declararse agentes libres sin restricciones) y, en general, enrareció aun más el ambiente de la negociación del nuevo CBA.

Los dueños querían probar un año sin tope salarial. Más que el tope, lo que les llamaba la atención era la ausencia de piso. Buena parte de equipos de los mercados pequeños (Kansas, Jancksonville, Seattle), vieron en el año sin restricciones salariales una buena posibilidad de reducir costos. En plena crisis económica mundial, los equipos claman por reducciones de costos y por encontrar nuevas formas de añadir ingresos a sus cuentas. Así, el principal punto en la nueva contratación colectiva, es como se reparten las ganancias. Aquí algunos de los puntos más importantes de la negociación:

-Nuevo sistema de repartición de ganancias: los dueños, con el argumento de la casi nula ganancia obtenida en el último tiempo, exigen poder reducir el porcentaje de las ganancias que va al pago de salarios de jugadores (en 2009 fue alrededor del 60%). El dinero que no se pague a los jugadores, iría a un fondo de alivio de deudas de los equipos. Los equipos NFL dicen estar altamente endeudados, especialmente aquellos que construyeron estadios nuevos e instalaciones de diferente índole en los últimos 3 años, o los que planean hacer remodelaciones en sus actuales instalaciones. Colts y Cowboys, por ejemplo, reportan que los costos de construcción de sus nuevos estadios aumentaron más de 20 % de lo presupuestado en los últimos 2 años de su construcción. Lo que represento un duro golpe a las finanzas de los equipos. Los dueños plantean que reducir el porcentaje dedicado a pagos, será beneficiosos para los jugadores en el largo plazo, cuando equipos menos endeudados, puedan pagar más y mejor. La NFLPA no hace oídos sordos a esa petición. Pero exigen que los equipos abran sus libros de cuentas y permitan al sindicato poder ver si realmente la situación es tan grave. Los equipos, obviamente, se han negado rotundamente a la exigencia de la NFLPA, argumentando que el sindicato tiene toda la información necesaria para la negociación. Ni más, ni menos. Sumado a todo esto, existe la disputa entre los dueños sobre cómo repartirse las ganancias entre ellos. Hasta ahora, los equipos habían repartido las ganancias comunes (derechos de mercadeo, de televisión, entre otros), de manera equitativa. En septiembre de 2009, Jerry Jones dijo que el actual sistema de repartición de ganancias entre los equipos estaba “de salida”. Los equipos de mercado grande exigen recibir dinero acorde a su impacto nacional. Los “nuevos ricos” de la fiesta, equipos que como New England ganaron adeptos masivamente en la última década, exigen mejor trato de parte de la liga y el resto de los dueños. Hasta que no haya acuerdo entre los dueños en ese punto, la negociación con los jugadores se hace casi imposible. Y el reloj corre…

-Establecimiento de un tope salarial para novatos: en esto, parece haber disputas dentro de la misma NFLPA. Como forma de ayudar a la reducción de costos que pregona la negociación, los dueños propusieron esta medida. Se entiende, desde la NFLPA, que los novatos deben ser los que carguen con la principal carga en la reducción de salarios. Jugadores veteranos aceptan la propuesta. Sin embargo, parece no haber pleno acuerdo respecto a la medida. Especialmente porque la última primera selección del draft (Sam Bradford), recibió de los Rams un contrato más alto que el mejor QB a nivel estadísticos de los últimos 20 años: Peyton Manning. Los agentes, parte importante del lobby de la NFLPA, se niegan a asumir el asunto. Especialmente porque será difícil hacer entender a los novatos de la clase 2011, que deben conformarse con mucho menos de lo que sus pares de 2010 recibieron.

-Temporada regular de 18 partidos: aquí la negociación se torna en blanco y negro. Los dueños proponen los 18 partidos como la mejor manera de aumentar ingresos. Los jugadores, exigen mucho más dinero si se les va a pedir que jueguen 2 partidos más de temporada regular. Voces de la NFLPA han establecido su absoluto desacuerdo con la propuesta. Especialmente por el altísimo nivel de lesiones que se han visto en el último tiempo y que aumentarían con una temporada más larga. En este punto, la negociación se plantea como punto de honor de la NFL. Sin 18 partidos, no se firma un nuevo CBA. Y, para la NFLPA, sin más dinero por los 18 partidos, no se firma el nuevo CBA.

-Aumento en la ayuda a los retirados y aumento en las pruebas anti dopaje: una de las formas de escape al primer punto, es aumentar el porcentaje de ayuda y responsabilidad de los equipos en la ayuda a los veteranos retirados y en la investigación para mejorar su vida post-retiro. En este momento, la mayor carga en ambos puntos la tiene la NFLPA. Especialmente en lo primero. Gene Upshaw, ex presidente de la NFLPA y fallecido en 2008, fue uno de los precursores de la idea de exigir a los equipos tomar mayor responsabilidad en la vida post-football de sus jugadores. Además, las investigaciones para determinar las consecuencias medicas de las lesiones en la práctica del deporte (especialmente las conmociones cerebrales), son llevadas adelante con dinero del gobierno estadounidense (aprobado por el Congreso) y con aportes del sindicato. Poca o casi nula ha sido la ayuda de los equipos en este aspecto. Por su parte, la NFL exige algo que no pudieron establecer en el actual CBA: las pruebas para detección de HGH a través de muestras de sangre. Hasta ahora, la liga realiza esas pruebas con muestras de orina. Se ha demostrado que la orina no es absolutamente efectiva como forma de detección de consumo de HGH en el pasado reciente. La sangre, si lo es. Pero a ese punto se negó rotundamente Upshaw y aun no se tiene la postura oficial del nuevo Director Ejecutivo de la NFLPA: DeMaurice Smith.

La negociación aun está lejos de llegar a un punto de no retorno. Sin embargo, el golpe de marzo fue importante. Los dueños lograron tener su offseason sin tope salarial y ahorraron una buena cantidad de dinero. Pero, la contraparte recibió la queja de varios de sus protegidos al verse afectados por las diferentes ramificaciones de la ausencia de tope salarial (jugadores que en lugar de ser agentes libre sin restricciones, recibieron mucho menos dinero de sus actuales equipo, jugadores que no pudieron negociar nuevos contratos, entre otras).

Los puntos de honor de cada parte han quedado establecidos. Pero, en el ambiente actual, queda claro que alguna de las partes tendrá que ceder en sus más altas exigencias. La consecuencia de no llegar a un acuerdo antes del 4 de Marzo de 2011 es el retraso de todo el proceso de offseason: anuncio del calendario, minicamps de novatos y programas de acondicionamiento. Y, en el peor de los casos, la suspensión de la temporada 2011.

Ambas partes entienden el riesgo del juego que llevan adelante. La NFL, como negocio, es la liga que más dinero produce por derechos de mercadeo y televisación internacional año tras año. Ninguna liga profesional en el mundo genera tanto dinero en 5 meses como lo hace la NFL. En esa medida, ambas partes están jugando con la “gallina de los huevos de oro”. La posibilidad de que deje de producirlos por, al menos un año, es aún incierta. Lo que sí es absolutamente sabido por ambas partes, son las consecuencias de tal eventualidad.

Descansando en que ambas partes entiendan ese punto, los involucrados a este deporte esperan una solución pronta y satisfactoria a esta situación. Entretanto, disfruten de la temporada 2010…