viernes, 1 de octubre de 2010

Semana 4: El inicio...


La semana 4 es considerada por muchos el comienzo de le verdadera temporada. Sin los errores del inicio y con el regreso a la normalidad de los rendimientos demasiado altos, la semana 4 es el inicio del resto del año. Lo que se vea a partir de ahora, serán mas confirmaciones que dudas.

-Tennessee, Atlanta y Tampa son, seguramente, buenas pruebas para cualquier defensiva. Especialmente los primeros dos. Lo que enfrentaran los Steelers por primera vez este fin de semana, es una defensiva de calibre. La filosofía de estos Steelers es ganar partidos de pocos puntos. En competencias de fuerza ofensiva, Pittsburgh está muy lejos de poder siquiera competir. Si hay algo que no quieres ver es a la inconsistente línea ofensiva de Pittsburgh contra los mas que rendidores 3 frontales de los Ravens. Para la defensiva de Dick LeBeau, más que nunca, será necesario hacer que la presión por los costados sea efectiva contra Joe Flacco. Aun es un misterio el rendimiento del QB de los Ravens, pero si hay algo que podrá comprobar el domingo, es si su falta de precisión al principio del año, se debió a la presión recibida. Además, la línea ofensiva de los Ravens ha demostrado serios problemas contra las 3-4. El domingo enfrentaran a la mejor de la liga. Si Baltimore quiere ganar, deben llevar el partido al lugar donde Pittsburgh sufre: la ofensiva. Más aun, a la ofensiva de pase. Si hay algo con lo que se han visto medianamente comodos los Steelers este año, es corriendo. Si los Ravens toman ventaja temprana y los obligan a poner el partido en el brazo de Charlie Batch, la presión de los 3 frontales de Baltimore hará el resto del trabajo.

-El bautizado equipo bipolar, va a Oakland. Los Texans han permitido 9 capturas en sus últimos 2 partidos. No sorprende que en ambas ocasiones, haya sido contra defensiva 3-4 y que buena parte de esas capturas y de la presión recibida por Matt Schaub, haya llegado de los apoyadores externos o de los profundos (LaRon Landry V. Washington y DeMarcus Ware V. Dallas). Vuelven a enfrentar a una 4-3. Pero la de Oakland es hibrida. Ver 3-3-5 o 3-4 clásica, es algo que para los Raiders se ha hecho normal en este inicio de temporada. Contra los Texans, deberían aplicarlo mucho más. Han demostrado los Raiders buena capacidad para presionar pasadores y una secundaria que sigue teniendo rendimientos irregulares. Sera una buena prueba para la ofensiva de los Texans. Especialmente para su ofensiva de pase. En ofensiva, el juego para Oakland debe centrarse en lo que mejor han hecho hasta ahora: correr. Solo el efectivo juego terrestre (algo que sorprende teniendo en cuenta que Michael Bush sigue lesionado), ha permitido que el juego de pase se establezca. Como todo equipo que enfrente a los Texans, la principal preocupación de la defensiva debe ser Mario Williams. Aunque, los Cowboys demostraron que mientras Williams se mantenga fuera del rango peligroso para el QB, el resto de la defensiva de Houston es bastante endeble. La línea ofensiva de los Raiders (y el “peculiar” manejo del bolsillo de Steven Gradkowski) hace de Williams una verdadera amenaza.

-El domingo, Donovan McNabb vio todas las dudas alrededor de su línea ofensiva, cristalizarse frente a los Rams. Ir a Phily con esas dudas en la cabeza no es nada recomendable. Especialmente porque ya tiene bastante con regresar al sitio del que salió haciendo mucho ruido hace pocos meses. La principal preocupación de los Redskins debe ser correr efectivamente el balón. Algo que, hasta ahora, no han conseguido. Pero si hay algo que los Eagles sufren defensivamente, es el acarreo. Lograr correr efectivamente aliviara algo de la presión de McNabb. Del otro lado del balón, los Redskins enfrentan a una ofensiva que vive de la explosividad. Obligar a Vick y compañía a llevar una ofensiva sostenida y en la que la jugada grande no sea la principal fuente de puntos, puede terminar siendo la clave para Washington. La adaptación de los Redskins al esquema 3-4 va por los caminos esperados. La adaptación es lenta y si el personal no es el adecuado, mas aun. Contra Phily, la clave será jugar defensiva nickel en muchas ocasiones. Eso debería darle pocos espacios a Vick en la secundaria. De explotar esos espacios viven los Eagles desde que McNabb era el mandamás de esa ofensiva.

-El lunes podría comenzar a definirse la clase de competencia que tendrá la AFC Este por el resto del año. Si los Dolphins quieren pelear la división, será necesario sacar la victoria contra New England. Dos derrotas consecutivas en casa y contra rivales de división serian mortales. Aun a esta altura de la temporada. Enfrentan los Dolphins a una defensiva cuyo bajo rendimiento se ha expandido de la secundaria a la línea defensiva. La demostración de Chad Henne contra los Jets es una buena señal. Si los Dolphins diversifican su plan de juego lo suficiente, para New England será difícil presionar al QB y detener el acarreo. Lo que debería preocupar a Bill Belichick es que los Pats no tienen un esquinero que sea medianamente capaz de marcar a Brandon Marshall. Y que si los apoyadores se comprometen con la presión a Henne, las posibilidades de ayuda en la secundaria se reducen mucho. Defensivamente, los Dolphins tendrán que jugar varias veces defensiva nickel. Los 3 esquineros serán necesarios para Moss, Walker y los versátiles Hernandez y Gronkowski. Esos dos son especialmente importantes. Miami ha sufrido marcando alas cerradas de calidad. Hernández puede ser alineado con un esquinero, aunque físicamente el defensivo pierda el emparejamiento. En cualquier caso, esa será un arma que tendrá que explotar Brady si quiere generarle problemas a los Dolphins. Si lo consigue, Mike Nolan tendrá que emparejar a los apoyadores con alas cerradas. Eso reduciría la capacidad de presión por los costados. Porque obligaría a los Dolphins a tener solo a Cameron Wake o solo a Koa Misi en el terreno.

-San Francisco estrena Coordinador Ofensivo en Atlanta. No precisamente el lugar al que quieres ir si estas 0-3. Especialmente si los Falcons vienen de ganarle a New Orleans en Louisiana.

-Mark Sánchez tiene 6 TD en los últimos 2 partidos. La secundaria de los Bills (en teoría su punto fuerte), fue victimizada por Tom Brady hace una semana. Si se da la teoría, alguno de los dos volverá a su rendimiento histórico.

-Cleveland tiene que, necesariamente, poner en problemas a Carson Palmer. El QB de los Bengals ha caminado por la cornisa las últimas 2 semanas. Los Browns siguen teniendo una defensiva que merece algo más de respeto del que le da los números.

-Uno de los “Mano a Mano” más interesantes del fin de semana: la línea ofensiva de los Packers contra la línea defensiva de los Lions. No porque sea un choque de potencias. Sino porque la primera es una oda a la ineficiencia y la segunda es de las mejores de la liga hasta ahora.

-La defensiva de San Luis dio una demostración ante Washington de lo que hace una 4-3 que es eficiente presionando al QB. Contra Seattle, tendrán que hacer algo parecido ante el, hasta ahora inconsistente, Matt Hasselbeck.

-Si la formula de éxito para un pasador novato es darle buen soporte por tierra, esa fórmula es doblemente cierta en Carolina. El triple si se considera que el único punto de los Saints que no quieres retar es su secundaria.

-Indy va a Jacksonville a enfrentar al equipo menos competitivo de la liga en este momento (y pongo a Buffalo por encima de ellos). Pero los Jaguars le han generado problemas en los últimos 5 años a los Colts. Cualquier descuido puede hacer de este un partido cerrado.

-Los Bears van a la capital nacional de la indisciplina. Si los Giants quieren rebotar en lo que les resta de temporada, Chicago es el mejor rival para hacerlo. Para los Bears, arrancar 4-0 era un mal chiste a principio de año. A esta altura, luce como obligación.