miércoles, 24 de noviembre de 2010

Previa: Semana 12.


Semana de fiestas en Estados Unidos, previa temprana en el blog…

Los oportunos Pats van a Detroit. A esta altura de la temporada, ir a Detroit es una prueba a la concentración de un equipo que tiene el partido más importante de su temporada dentro de una semana en Foxboro contra los Jets. La clave para los Pats ha sido reducir las entregas. Cuando pierden la batalla de los intercambios de balón, pierden el partido. No por nada, su única derrota en los últimos 4 partidos llego en el único de esos juegos en los que entregaron el balón (3 veces en Cleveland). Para Detroit, la única preocupación a esta altura es no terminar en el fondo de la división una vez más (tienen apenas 1 victoria menos que los Vikes). Desde el regreso de Logan Mankins, la línea ofensiva de New England ha sido de lo mejor de la liga. Enfrentan a 4 frontales dominantes y a una defensiva de pase que cumple en la medida de sus posibilidades. Los cada vez más importantes Benjarvus Green-Ellis y Danny Woodhead deberían ser factores. Además, Tom Brady volvió a tener una semana recortada de entrenamientos por dolores en su hombro derecho. Teniendo que jugar un jueves y enfrentando a una defensiva que presiona mucho y muy bien al pasador rival, ese puede ser un factor.

La primera derrota de los Saints en 2009 fue en casa contra Dallas. Aquellos Saints perderían 2 partidos más antes de playoffs y el resto es archiconocido. Ni los Cowboys son el mismo equipo de 2009, ni los Saints pueden darse el lujo de perder partidos. Con Tampa tan cerca, los Saints deben hacer todo lo posible por llegar con ventaja a sus últimos 2 partidos de la temporada (visita a Atlanta y recibir a Tampa Bay). Tener a su secundaria sana es la mejor noticia del cierre de temporada para New Orleans. Especialmente porque Jon Kitna se ha aprovechado de la buena protección que ha recibido en las últimas 2 semanas, para trabajar secundarias. Si Reggie Bush puede regresar, el ataque aéreo de los Saints tendrá una adición enorme. Especialmente porque los Cowboys no tienen suficientes miembros en la secundaria para defender receptores y un corredor capaz de recibir pases y producir yardas después de la recepción. La presión al pasador sigue siendo la base de la defensiva de los Cowboys. En la medida en que puedan apresurar a Drew Brees, serán capaces de generar jugadas grandes.

Los Jets han ganado partidos cardiacos, de detalles. Han necesitado actuaciones excepcionales de Mark Sánchez para sacar adelante resultados contra equipos que fueron capaces de aprovechar (al menos a medias) las concesiones de una defensiva que no es tan buena como la de 2009. En ese contexto, recibir a Cincy o a los Pats es exactamente lo mismo. Si los Jets quieren tener un buen mes de enero, deben comenzar a cerrar los partidos que dominan. Eso, en playoffs, puede dejarte fuera en un abrir y cerrar de ojos. La de los Bengals es una defensiva que sigue sufriendo por su nula capacidad de presionar pasadores. Aun con ese problema, han sido capaces de conseguir algunos resultados interesantes en secundaria. Que Leon Hall y Jonathan Joseph estén activos contra los Jets, es fundamental para el plan de juego de Cincy. Aunque el enfrentamiento más interesante, será el de la otra secundaria contra el otro set de receptores. Darrelle Revis marcara a Chad Ochocinco y Antonio Cromartie a Terrell Owens. Suena lógico. Especialmente porque Carson Palmer ha mostrado más “cercanía” con Owens que con Ochocinco (Palmer ha intentado 117 pases a Owens y 94 Esteban Ochocinco). La línea de los Jets no ha sido precisamente una eminencia protegiendo a Sanchez en los últimos partidos. Escapadas circenses del QB contra Cleveland y Houston explican en buena medida las victorias de los Jets. Los Bengals parecen una buena manera de recuperarse para la línea de los Jets.

El domingo en Georgia Dome, se juega el que será, al menos según quien escribe, el partido de campeonato de la NFC. Si se da la lógica y ambos equipos mantienen el nivel mostrado hasta ahora, no deberían tener problemas para llegar hasta esa instancia. En las últimas 4 semanas, al menos 3 equipos han pretendido reclamar el título de “mejor de la NFC”. En este blog, sostenemos desde la semana 6, que esos son los Atlanta Falcons. Giants, Eagles, incluso Packers han tenido resultados lo bastante altisonantes como para que se les considere el mejor de la conferencia. Pero ninguno ha mostrado la consistencia de los Falcons. Este juego se trata de maximizar los atributos y hacer lo mejor posible por esconder las debilidades. O que, al menos, se noten poco. Eso hacen los Falcons. Con una secundaria que está lejos del primer nivel, han sido capaces de forzar errores con una buena presión de sus 4 frontales. Además, esa buena actuación de los 4 frontales ha permitido que el resto de la defensiva pueda centrarse en parar el acarreo o en llenar la zona media y profunda con defensivos. Correr contra los Falcons es muy difícil. Pasar, es menos sencillo de lo que los números muestran. En cualquier caso, el del domingo es el enfrentamiento de la mejor escuadra de un equipo contra la mejor de otro: la defensiva de Green Bay contra la ofensiva de Atlanta. Todo, se resume a Tramon Williams marcando a Roddy White. Williams viene de su mejor partido desde la semana 1. White es la clave de la ofensiva de Atlanta. Aunque, en la fotografía completa, la defensiva de Green Bay parte con ventaja. El recuperado Cullen Jenkins ha sido una gran solución a la falta de presión por el costado opuesto a Clay Matthews. Desde el regreso de Jenkins, la defensiva ha tenido rendimientos altísimos. La del domingo es una de las pruebas más interesantes que enfrentaran en la temporada.

Para Miami, ir a Oakland puede ser una manera de revivir sus ya mínimas esperanzas o de terminar de manera desastrosa una temporada que ya viene bastante mal. Chad Henne volvió a practicar esta semana, pero solo el domingo se sabrá si está en condiciones de ser titular. Jason Campbell seguirá siendo titular. Aunque el verdadero problema de los Raiders, es que Darren McFadden rebote del pésimo rendimiento que tuvo en Heinz Field (10 acarreos, 14 yardas).

Los Giants mostraron el camino que debe seguir una defensiva que enfrenta a Michael Vick. Muchísima presión, sobrecargar el costado izquierdo (el derecho de la defensiva) para evitar que Vick escape hacia el costado en el que mas cómodo ejecuta y un esquema 3 man deep en secundaria, sirvieron para casi ganarle a los Eagles el domingo. Solo esa terrible forma de manejar una cuarta oportunidad los alejo de la victoria. Si hay otro equipo que puede hacer eso contra los Eagles, es Chicago. El problema para los Bears, es que su ofensiva enfrentara a una defensiva tan buena como la propia. Y las armas de que dispone Jay Cutler son muy inferiores a las que tiene Vick.

SI alguien decía al principio de la temporada que Tampa iría a Baltimore en la semana 12 con el mismo record de los Ravens, muchos pensarían que era el presagio de una mala temporada para los Ravens. Que el equipo de Raheem Morris pueda ir a Maryland con 4 juegos arriba de .500 realmente sorprende. En una división que tiene a 3 de los mejores equipos de la conferencia (y como consecuencia al peor de la liga), los Bucs no pueden darse el lujo de perder un partido. Su esperanza de playoffs, descansa en llegar con vida a la última semana cuando les toca visitar Louisiana Superdome. Tienen dos partidos muy difíciles. La visita a Baltimore será seguida por un partido contra Atlanta que tiene las mismas implicaciones de playoffs que el de esta semana. Para Baltimore, los problemas no son demasiados. Considerando la inconsistencia de los Steelers y teniendo todavía que enfrentarlos en casa, el partido del domingo tiene más implicaciones de separación en la división quede vida o muerte.

Los Colts tienen un problema. Si, se trata de lesiones. Pero no, no se trata de la ofensiva. A esta altura no existen dudas de que Peyton Manning puede hacer a cualquier receptor, uno de elite (Blair White es la mejor demostración). Son las lesiones en su defensiva las que tienen a los Colts en un problema. Enfrentan el domingo en la noche al QB con más armas aéreas de la liga. Con el regreso de Vincent Jackson y los habituales Malcom Floyd y compañía, será un problema marcar a tantos objetivos. El principal problema de Indy es que no tiene a 2 de sus 3 apoyadores titulares. Gary Brackett y Clint Session le hacen una falta enorme al esquema defensivo de los Colts. En Foxboro, Tom Brady aprovecho la desubicación inicial de Pat Angerer (el sustituto de Brackett) para llenar de pases a la zona media a la defensiva de Indy en la primera mitad de ese partido. Si hay algo que hace bien Philip Rivers, es utilizar a sus corredores en rutas de pantalla y atacando la zona media. Darren Sproles puede ser un dolor de cabeza de todo el partido, si Brackett no juega y Angerer se sigue viendo inseguro. Ademas, Peyton Manning tiene sus propios problemas. Antoine Cason sigue subiendo el nivel y seguramente será el encargado de marcar a Reggie Wayne. Si mira al otro lado, Quentin Jammer lo estará esperando. Un reto nada sencillo el que recibirán los Colts en Lucas Oil.