jueves, 5 de septiembre de 2013

Previa AFC Norte 2013: Baltimore Ravens


Hay dos formas de mirarlo: 1) Este equipo perdió demasiadas piezas como para ser competitivo; 2) Este equipo se deshizo de jugadores que no contribuían más allá del gran nombre. En cualquiera de las dos posturas, lo que queda claro es que en Baltimore comenzó una nueva era después del título. Es cierto que varias de las piezas que salieron eran engranajes de un esquema. Pero eso no significa que cualquiera pueda hacer el trabajo de los que salieron. El error de percepción común es que cuando un esquema funciona, se piensa que cualquiera puede ejecutar en él. El talento no es una cuestión menor y en estos Ravens el talento es mucho menor este año, al menos de entrada, que el del año del título.

OFENSIVA


¿Es Joe Flacco un pasador de elite? Su contrato dice que sí. El anillo en su mano derecha dice que sí. Su rendimiento en enero de 2013 dice que sí. El resto queda para ser discutido por aquellos que piensan que puede discutirse quien es mejor entre Manning y Brady o aquellos que tienen fe ciega en Tony Romo. Los anillos son todo lo que importa en este deporte. Por eso Montana es un genio y Marino un tipo conocido. El titulo de los Ravens descansa en gran medida en el enero espectacular de Flacco, que no lanzo intercepciones a pesar de haberse visto contra defensivas del calibre de la de Denver o San Francisco. Pero la de este año es otra historia. Los Ravens tuvieron que limpiar su roster en función de ajustarse al tope salarial y una de las víctimas fue Anquan Boldin, el elemento diferente del juego de pase. Boldin, ahora en San Francisco, era el que le daba sentido a una ofensiva que vivió durante la época de Cam Cameron de la capacidad del brazo de Flacco para ejecutar jugadas grandes. Sin alguien que trabaje rutas intermedias y que tenga manos confiables para ir en tercera oportunidad, la idea era que Dennis Pitta asumiera el rol de principal arma en zona media de Flacco, pero Pitta se lesiono la cadera en los entrenamientos y se perderá la temporada. En semejante escenario, no son demasiadas las opciones disponibles. Jacoby Jones y Torrey Smith son receptores con velocidad y capacidad para trabajar zona profunda. El problema con ambos es básicamente el mismo: son manos poco confiables porque están acostumbrados a trabajar pases de bajo porcentaje. Flacco necesitara que alguno de los dos emerja como opción para trabajo medio o la ofensiva de pase se verá seriamente afecta. El tercer receptor es Brandon Stockley, que puede fungir como arma en zona media, pero solo situacionalmente. Si las defensivas rivales saben que quitando la jugada profunda del libro de Flacco reducirán su capacidad de daño, el trabajo se les hará mucho más sencillo. Las alas cerradas serán Ed Dickson, un receptor situacional que usualmente veía sus mejores días con Pitta en formación al mismo tiempo y un Dallas Clark en horas bajas, lejos de la forma que mostro en Indy con Peyton Maning. Con los costados tan deprimidos, el backfield tendrá que proveer mayor ayuda de la usual. Eso no es problema para Ray Rice, uno de los principales afectados por el soporífero esquema de Cam Cameron. Rice es un playmaker de elite que puede convertir en yardas adicionales muchos checkdowns y acarreos que parecen para perdida. Su papel en la ofensiva de pase tendrá que verse duplicado ante tan pocas opciones en zona media. El otro corredor es Bernard Pierce, un jugador con mucha mayor capacidad de acarreo de poder entre los tackles. Mucho menos elusivo que Rice, pero con mejor carrocería, Pierce es un complemento de tercera oportunidad ideal para esta ofensiva. La línea ofensiva es básicamente la misma que gano el título en New Orleans, pero los momentos son diferentes en algunos casos. El veterano tackle izquierdo Bryant McKinnie, que tuvo un playoffs espectacular se reportó a los entrenamientos pasado de peso. Ese ha sido su gran problema para encontrar un lugar en la liga donde trabajar. El contrato que firmó con Baltimore tiene clausulas muy específicas sobre mantenerse en forma. Al menos a principios del campamento de entrenamientos no lo cumplió. El centro será Gino Gradkowski, una selección de cuarta ronda en 2012 que sustituye al All-Pro retirado Matt Birk. Sin experiencia en la liga, es difícil saber cómo responderá. Los otros tres titulares son mucho más sólidos. El guardia izquierdo Kelechi Osemele mostro solidez en todas las facetas de su juego en el playoffs, cuando fue movido a esa posición. Durante la temporada había jugado como tackle derecho sin demasiado que mostrar. El encargado del tackle derecho es Michael Oher, que regresa a la posición de la línea donde se siente más cómodo. El guardia derecho es Marshall Yanda, un jugador top 3 en su posición.

DEFENSIVA

Cuando menos en las últimas dos temporadas, Ed Reed y Ray Lewis no fueron factores en esta defensiva. Dean Pees llevo a este equipo en años consecutivos al partido por el campeonato de la conferencia en Foxboro y lo hizo con una base de jugadores hechos a la medida para su esquema de frentes hibridos, presión por los costados e incorporación de elementos de la secundaria a la caja. Reed y Lewis ya no están y más allá de la sobrevalorada contribución en el vestuario, no son ellos las principales perdidas de esta defensiva. Lo que perdieron los Ravens fueron jugadores que se ajustaban a la medida al esquema de Pees, aun con algún exceso o falta de trabajo. La consecuencia, es una defensiva que luce mucho menos intimidante de entrada y cuya profundidad (uno de los fuertes del equipo en 2012, especialmente en la caja), se ha visto seriamente afectada. La caja de los Ravens sufrió mucho más de lo usual contra el acarreo en 2012, especialmente contra equipos que emplean el bloqueo en zona. Ese declive vino en gran medida por los problemas físicos (ergo de rendimiento) de Haloti Ngata, el único miembro de la línea defensiva capaz de marcar dos espacios consistentemente. Ngata podrá volver a sus funciones de tackle nariz, porque los Ravens tienen ahora a Marcus Spears, Chris Canty y Arthur Jones para trabajar los costados. Los dos primeros ya fueron compañeros en Dallas, pero la edad puede ser un problema. En cualquier caso, ninguno de los tres asegura capacidad de presión a los pasadores rivales y dependiendo del nivel de Ngata los problemas contra el acarreo pueden seguirse presentando. Los apoyadores tienen gran nivel en los costados, pero casi nula profundidad en general. Terrell Suggs es ahora el referente de la defensiva y comenzara el año sin lesiones por primera vez en mucho rato. A las labores de presión se suma Elvis Dumervil, un golpe maestro del gerente general Ozzie Newsome. Dumervil es un jugador de elite que solo salió de Denver por uno bizarro enredo administrativo. La pareja Suggs-Dumervil debería bastar para generar presión constante sobre los pasadores rivales. Detrás de ellos no hay mucho más, porque los Ravens perdieron a Paul Kruger en la agencia libre. EL jugador de segundo año Courtney Upshaw mostro muy buenos atributos contra el acarreo el año pasado en un rol situacional. Este año vera mucha más acción como principal sustituto de Dumervil y Suggs. El centro de la caja es el que más reciente las incorporaciones. Darnell Ellerbe es otro de los que se fue. Al igual que Kruger, era un engranaje de esquema que rendía por las características del ambiente en el que estaba. Pero su ausencia pesara. Josh Barnes y Daryl Smith son los nuevos apoyadores medios. Nada especial. Los Ravens usaron su pick de segunda ronda para tomar a Arthur Brown, un apoyador medio que, esperan pueda asumir el lugar de algunos de los dos titulares en algún momento de la temporada. Especialmente si los problemas de Ngata se extienden a este año y el acarreo sigue siendo un problema sin solución. La secundaria tiene de regreso a Lardarius Webb, que se rompió el ligamento cruzado a mediados de la temporada pasada. Esa es una excelente noticia, teniendo en cuenta que Webb es uno de los mejores esquineros de la liga marcando mano a mano en zona profunda. Del otro lado, la partida de Cary Williams (otro relleno de esquema que dio resultado), será cubierta por Corey Graham, un jugador que se especializo en la ranura el año pasado. Camino a su cuarto año, Jimmy Smith, una selección de primera ronda en 2011, aún no ha mostrado absolutamente nada que valide tan alta selección. Tendrá que dar un paso al frente si quiere seguir teniendo trabajo en Maryland. En zona profunda, la partida de Reed es cubierta por Michael Huff, una de las pocas selecciones de draft no cuestionables de Al Davis en Oakland. Huff es un muy buen safety para marcar líneas de pase. No tiene la habilidad de ball hawk que tiene Reed, pero puede generar cambios de posesión efectivamente. El otro safety James Ihedigo o el novato de primera ronda Matt Elam. El que se quede con el trabajo tendrá la tarea de sustituir a Bernard Pollard como eminente complemento de cajas y ayuda contra el acarreo.

PRONOSTICO
: Nadie debe olvidar la conversión en 4ta y 29 en Qualcomm Stadium en la semana 12 o Mile High Rainbow. Dos jugadas de bajísimo porcentaje, que ayudaron a que este equipo consiguiera el título. Después podemos hablar de “la suerte del campeón”, pero queda claro que no se puede depender de eso dos años seguidos. Una cosa es perder talento y otra es afectar el esquema en el proceso. Baltimore perdió mucho más de lo que añadió y es inevitable pensar que mientras se ajustan las piezas habrá curvas de aprendizaje que costaran rendimiento. En una división donde Pittsburgh esta en uno de los últimos viajes de un núcleo más que talentoso y Cincy tiene una colección de talento superior, es difícil pensar que sin eventos mágico-circenses como los descritos al inicio, este equipo tenga posibilidades en la conferencia (por no hablar de una división que luce muy compleja). 3eros en la AFC Norte.