sábado, 7 de septiembre de 2013

Previa NFC Norte 2013: Detroit Lions

De un año de buen rendimiento y clasificación a playoffs por primera vez en 12 años, a una temporada de 4-12 con records individuales pero bajísimo rendimiento colectivo. Lo visto en 2012 en Detroit, hace pensar que la temporada 2011 con clasificación a playoffs fue un accidente. Después de todo, lo visto el año pasado se parece mucho más a lo que la franquicia nos tiene acostumbrados. Este equipo tiene una colección de talento interesante, pero la poca disciplina de su entrenador y la baja profundidad en algunos lugares clave afectan sus posibilidades. En una división donde otro equipo centrado en el rendimiento de un jugador sí parece capaz de convertir eso en pasaje a enero, el trabajo de Detroit es dejar de ser una suma de tipos con buenos números y convertirse en una suma complementaria de talentos.

OFENSIVA

Sumen la segunda ofensiva con más yardas aéreas de la liga (4927 yardas), con un extraordinario promedio de conversión en terceras oportunidades (42.5%) y apenas un 6% de jugadas de pase que terminaron en captura o perdida de yardas y tendrán lo que parece una receta de explosividad tremenda ¿Verdad? NO!!! El tema con los Lions es que semejante rendimiento apenas pudo traducirse en 22 TD aéreos. Piensen que los Saints (la mejor ofensiva aérea de 2012), produjo 43 TD’s por pase y los Pats (la cuarta mejor), 34 pases de TD. En ese contexto, el record de yardas aéreas de Calvin Johnson sabe a muy poco. De hecho, no solo no significa nada, sino que tiene mucho de intrascendente, teniendo en cuenta que alrededor del 30% de las yardas de Johnson, llevaron en el último cuarto con el equipo perdiendo por más de un TD (tiempo conocido como garbage time). Johnson, seguramente el mejor receptor de la liga en la actualidad, es la base de esta ofensiva. El record tiene sentido desde la perspectiva del poco talento que tienen los Lions en las esquinas para recibir pases. Básicamente, se trata de que Mathew Stafford solo tenía a Johnson para trabajar consistentemente. Nate Burleson no ha podido rendir en Detroit lo que se esperaba de él, luego de fracturarse la pierna en 2011. Ryan Broyles llego el año pasado vía draft y mostro cosas interesantes, hasta romperse el ligamento cruzado anterior en diciembre. Tony Scheffler no es precisamente el ala cerrada más confiable de la liga para recibir pases y Brandon Pettigrew tiene buenas manos, pero suelta demasiados pases (12 en 2012). En las esquinas hay poco talento, pero la gerencia invirtió este offseason en un jugador que puede dar vuelta a la ofensiva, desde el backfield. Cuenten a quien escribe entre los que pensaba que Reggie Bush no podría rendir como corredor principal en Miami. No solo lo hizo, sino que logro estar en todos excepto 1 partido en sus dos años en Florida. Su llegada a Detroit puede darle mucha mayor fluidez a la ofensiva teniendo a un jugador capaz de acarrear entre los tackles con efectividad y, especialmente, recibir pases desde el backfield o invadiendo los flats. Esa clase de talento no la tienen los Lions desde que Jahvid Best llego en 2011, antes de tener todos los problemas de salud que lo alejaron del equipo. El otro corredor es Mikel Leshoure, un buen complemento para trabajar por fuera de los tackles, pero poco más. Que Bush pueda asumir la mayoría de los snaps en el backfield es esencial para Stafford. La línea ofensiva perdió a sus dos tackles titulares este offseason. Jeff Backus se retiró y Gosder Cherilus se fue a Indy por una cantidad de dinero que nadie más estaría dispuesto a pagarle. Sus sustitutos serán Reilly Reiff, de segundo año y Jason Fox, que jugo muy poco en el último tiempo. Reiff, una selección de primera ronda en 2012, vio acción el año pasado con pobrísimos resultados en la derecha. Su pesada y lenta movilidad pueden generar problemas contra elite rushers. La solución a esto viene desde la época de Backus. Por cuestiones de comodidad del pasador y para hacer más fácil el trabajo de la línea ofensiva, Detroit juega casi el 70% de sus snaps desde formación escopeta. Eso reduce los pasos de retroceso del pasador y crea un colchón de tiempo aprovechable por los tackles en los bloqueos. Por el centro, los regulares Rob Sims y Dominic Raiola, son bloqueadores un tanto pesados que necesitan todo el espacio disponible, por la lentitud de su primer paso. Si Bush logra establecerse como arma multifunciones en esta ofensiva, podremos volver a ver rendimientos similares a los de 2011. En caso contrario, Johnson puede romper su propio record y la ofensiva seguirá siendo ineficiente como conjunto. 

DEFENSIVA

Tres de los cuatro linieros defensivos titulares de este equipo, son selecciones top 15 en el draft (dos son top 5). Cualquiera pensaría que Detroit tiene a los mejores frontales de la liga. Pero, de nuevo, es un error de concepto. Ndamukong Suh fue el primero en llegar (2010). Aun con una temporada de novato extraordinaria, con 10 capturas, en las siguientes tres temporadas, Suh ha acumulado apenas 12.5 capturas. Al año siguiente llego Nick Fairley, un especialista contra el acarreo de Auburn. 6.5 capturas y 2 balones sueltos forzados en dos temporadas. Fairley ha tenido más incidentes con la policía que balones sueltos forzados desde que llego a la NFL. El tercero de la lista llega este año. Ezequiel “Ziggy” Ansah llega a los Lions procedente de BYU, donde apenas jugo 9 partidos como titular (todos en su último año en la universidad) y solo tiene 3 años practicando el deporte. Como en ofensiva, la línea defensiva de Detroit perdió a los responsables de los costados. Cliff Avril fue dejado ir a Seattle vía agencia libre y Kyle Vanden Bosch fue dejado libre en febrero. Ansah llega para trabajar uno de los costados. Tiene velocidad pura y un excelente primer paso. Pero aún debe aprender a manejar la técnica contra tackles con igual explosividad. El talento está ahí. El otro costado será de Jason Jones, que llega desde Tennessee donde era tackle/ala. La conversión en el esquema de Gunther Cunningham (coordinador defensivo de los Lions), puede ser un tanto más difícil, teniendo en cuenta que aquí usan conceptos de Wide-9 en línea defensiva. Wide 9 es, en esencia, alinear a las alas defensivas mucho más abiertas de lo acostumbrado (respecto al hombro externo del tackle que tienen en frente). La formación demanda mucha rapidez y explosividad de parte de las alas para ir sobre el espacio y usar agilidad para salir del bloqueo rápidamente. Detroit puede hacerlo porque sus tackles son capaces de ocupar mucho espacio en el centro, pero si Jones no puede lograr que la explosividad aparezca, será un dolor de cabeza todo el año. Los apoyadores, Stephen Tulloch, DeAndre Levy y el debutante Ashlee Palmer están ahí porque no hay mejores opciones. De Palmer aún se puede tener el beneficio de la duda, pero Tulloch y Levy sufrieron de lo lindo en 2012 para detener lo que escapaba de manos de Suh y Fairley. La secundaria incorpora a Glover Quin un más que respetable complemento de cajas con alguna habilidad sobresaliente marcando pase en campo abierto. Cunningham envía a sus safeties profundos a jugar Cover 2 en mayoría de snaps, porque las labores de presión deberían ser absoluta responsabilidad de los 4 frontales. El otro safety es Louis Delmas, un muy buen jugador que ha tenido la desgracia de jugar solo 13 partidos en las últimas dos temporadas por una serie de costosas lesiones. Los esquineros serán Chris Houston, que puede defenderse jugando zona, aunque no es nada especial y el novato de segunda ronda Darius Slay, un esquinero de vieja escuela (físicamente hablando). Pequeño, ágil y extremadamente hábil para ir sobre el balón sin perder la referencia. Slay puede ser un jugador interesante si se le permite tener trabajo constante en la esquina este año. Algo que, por la falta de talento, no debería ser un problema.



PRONOSTICO: En el entendido de que otra temporada como la de 2012 le costara el trabajo a Jim Schwartz, es absolutamente comprensible que la esperanza este colocada en que lo de 2011 no fue un accidente, sino lo que debería ser este equipo en general cuando todas las piezas se engranan. Detroit tuvo record de 1-10 contra equipos de record positivo en 2012. Algo que puede repetirse sin problemas, teniendo en cuenta que tienen partidos contra Chicago, NY Giants, Steelers, Ravens, Bengals, Redskins y los dos partidos contra Vikes y Packers. Si la adición Bush rinde frutos, la ofensiva puede llevar el barco a buen puerto. Si eso no ocurre, enero será mes de limpieza general y no de fiesta como hace 2 años. 4tos en la NFC Norte.