Ganar 9 partidos en la temporada posterior a ganar el Super Bowl no es nada despreciable. Menos aun si se considera que con ese mismo numero de victorias, conseguiste clasificación a enero un año antes. Todo pasa por una especie de redescubrimiento de la competitividad en la división. Los Giants de 2012 no distaron demasiado de los de 2011. La única diferencia sustancial fue el rendimiento por debajo de lo esperado de la defensiva (algo en lo que también se parecieron mucho a la versión de 2011). Ya el tema con este equipo no es de talento o esquema. Pasa mas por los intangibles de la temporada y el nivel competitivo de la división. Tienen talento para pelearla, lo demás es un tema de detalles.
OFENSIVA
La segunda mitad de 2012, vio una de las peores versiones de Eli Manning que se han visto en la liga en mucho tiempo. Todos saben que Eli tiene un alter ego (Bad Eli), una especie de antítesis de lo que debe ser un pasador franquicia. Pero el que apareció en la segunda mitad de la temporada pasada no fue esa versión. Fue una versión que sin tantos errores groseros, parecía cansada y extremadamente desencajada. Manning, la gerencia de los Giants y Tom Coughlin intentaron explicar el descenso de rendimiento a partir de la tesis del “cansancio en el brazo”; algo medianamente comprensible si se ve la falta de gas de los pases de Manning a final de la temporada. Como sea, ese bajón y uno de similares proporciones de la defensiva le costaron a los Giants un cierre de 2-5 que los dejo fuera de enero. No se puede criticar a un tipo que tiene dos títulos en 5 años, pero alguna explicación debe haber a semejante descalabro, mas allá del brazo del QB. En cualquier caso, se asume que volverá en plenitud de condiciones y con eso, los Giants son candidatos elementales. El resto de la ofensiva tiene muy pocos retoques. En NY consideran que pueden pelear con lo que tienen ¿Y cómo no creerlo, si tienen 5 temporadas haciéndolo? Ahmad Bradshaw dejo el equipo finalmente este offseason. La responsabilidad absoluta del acarreo desde ahora será del jugador de segundo año David Wilson, cuya temporada de novato puede ser vista desde dos perspectivas: por un lado está el jugador con velocidad y elusividad de élite que promedio 5 yardas por acarreo intentado y le dio una dimensión mucho más explosiva a una ofensiva que Bradshaw mantenía aletargada; por otro lado, el problema esquemático generado por un jugador que es terrible bloqueando en jugadas de pase y no es precisamente un árbol de virtudes cuando de proteger el balón se trata. Esos dos defectos le costaron la titularidad a finales de la temporada pasada, porque si a algo te obliga la ofensiva de Kevin Gilbride, es a bloquear pase consistentemente si eres corredor. Wilson sigue siendo un corredor con capacidad de impacto inmediata, pero no tendrá futuro en esta ofensiva si no puede proteger la espalda de Eli Manning. La encargada de eso, la línea ofensiva, tiene solo un nuevo elemento, el resto regresa y con todo mérito. Will Beatty, el tackle izquierdo se gano una renovación por 5 años con su muy buen 2012 (permitió solo 3 capturas). El elemento nuevo es el tackle derecho novato Justin Pug, un liniero que puede ser tackle o guardia, seleccionado en primera ronda en gran medida por su capacidad atlética, algo que no podía aportar el ahora suplente David Diehl. Por el centro, Chris Snee, David Bass y Kevin Boothe, vienen de una temporada en la que como conjunto solo permitieron 3 capturas. Es una línea estable, al menos mucho mas de lo que era hace un año. En los costados están las principales dudas respecto a esta ofensiva. Hakeem Nicks es el receptor con las mejores manos que hay en NY. El problema es que una serie de lesiones disminuyeron su participación en toda la temporada 2012. Sin él, Victor Cruz sufre contra dobles coberturas o mucha mas atención en la ranura. Los Giants necesitan que Nicks esté totalmente sano (algo que no ha podido lograr en las ultimas 3 temporadas), para tener una ofensiva de pase consistente. La otra opción en esa zona es Reuben Randle, un jugador de segundo año que mostró cosas interesantes, pero aún no tiene la disciplina de cumplimiento de rutas y capacidad de separación para trabajar costados o recibir pases consistentemente en zona media. De Cruz el rendimiento que siempre se espera es explosivo. Es un playmaker con buen uso de las herramientas que tiene. Y uno de los especialistas en la ranura más peligrosos de la liga.
DEFENSIVA
La caída en desgracia de la defensiva fue menos publicitada que la de Manning, pero fue casi tan estrepitosa, especialmente por tratarse de varios miembros prominentes de la defensiva. Quizá al que peor le fue en el conjunto es al esquinero Corey Webster, cuya temporada se caracterizó por ser victimizado consistentemente por los pasadores rivales, especialmente en rutas profundas donde perdía la referencia en cuestión de segundos. Webster, que va a su noveno año en la liga, regresa solo por haber aceptado un recorte importante en su salario. La gerencia espera que logre regresar a forma de 2010-2011, eso es, un esquinero consistente en conceptos de zona cuya capacidad atlética era aprovechada especialmente en los flats. Si Webster sigue en modo 2012, la defensiva sufrirá. El otro esquinero es Prince Amukamara, una selección de primera ronda que ha estado muy lejos de poder cumplir con la expectativa. Con una necesidad casi patológica por marcar con colchones de entre 5 y 8 yardas respecto al receptor, Amukamara sufre al no tener el pedal para retroceder aceleradamente y sus instintos lo dejan en evidencia muchas veces. La zona profunda recibió un terrible golpe con la lesión de ligamentos del safety Stevie Brown, que lo dejara fuera todo el año. Brown era el titular ante la salida del equipo de Kenny Phillips, que no fue renovado por… problemas en las rodillas. A su lado, Antrell Rolle regresa a su cuarta temporada en NY. El coordinador Perry Fewell encontró un uso interesante para Rolle en los frentes nickel y dime, que es asignarle marca en zona alta (cerca de la línea) y luego de cierta progresión de la jugada, permitir que vaya libre al balón. En la caja de los Giants esta el otro bajón importante de la temporada pasada. Por mucho tiempo, Justin Tuck y Osi Umenyiora fueron la cara visible de una de las líneas defensivas mas dominantes del ultimo lustro. Pero las lesiones, en el caso de Tuck, y la edad, en el caso de Umenyiora, redujeron considerablemente su participación en la presión del equipo en la ultimas dos temporadas (Tuck, que promedio 10 capturas entre 2007 y 2010, apeas consiguió 9 en las ultimas 2 temporadas). Ese ha sido el tiempo de Jason Pierre-Paul (JPP) como cara visible de la caja. El problema de 2012 fue que el bajísimo aporte de Umenyiora y Tuck, se sumo a una baja en la producción de JPP. Además, ninguno de los tres entregó ningún tipo de garantías defendiendo el acarreo, algo de lo que se preciaba esta defensiva hasta hace muy poco. Umenyiora se fue a Atlanta y toda la responsabilidad de la presión queda en manos de JPP y Tuck, con la adicion situacional de Mathias Kiwanuka en formaciones nickel y dime. Por el centro, Lival Joseph y el recién firmado Cullen Jenkins añaden buen trabajo contra el acarreo y presión por el centro. Jenkins viene de dos temporadas en el fallido “dream team” de Philly, donde se le vio fuera de lugar como tackle de 4-3 en ocasiones. Los frentes hibridos de Fewell pueden ayudarle a retomar la forma que mostró en 2010 con Green Bay. Los Giants también firmaron a Shaun Rogers como agente libre. Aun esta por verse la contribución que pueda dar luego de estar un año inactivo por lesión. Los apoyadores serán Keith Rivers, Jacquin Williams y el que gane la batalla en los entrenamientos por el spot del centro entre Mike Heirzlich y el recién firmado Dan Connor. Los dos primeros son apoyos medianamente decentes contra el acarreo, pero poco mas. Connor podría apoyar mucho a la secundaria marcando pase si se gana el lugar.
PRONOSTICO: En un ambiente tan parecido al de 2012, nadie puede descartar a un equipo que arranco 7-2 y solo un terrible bache al final (y una remontada época de Washington) los dejo fuera. Eso si, la defensiva luce mucho menos confiable de entrada, que aquella que comenzó la temporada pasada. Menos profundidad en algunos lugares y profundidad de mucha menos calidad probada en otros. La división tiene no tiene un candidato claro, pero en el mix siempre deben estar los Giants. 2dos en la NFC Este.
OFENSIVA
La segunda mitad de 2012, vio una de las peores versiones de Eli Manning que se han visto en la liga en mucho tiempo. Todos saben que Eli tiene un alter ego (Bad Eli), una especie de antítesis de lo que debe ser un pasador franquicia. Pero el que apareció en la segunda mitad de la temporada pasada no fue esa versión. Fue una versión que sin tantos errores groseros, parecía cansada y extremadamente desencajada. Manning, la gerencia de los Giants y Tom Coughlin intentaron explicar el descenso de rendimiento a partir de la tesis del “cansancio en el brazo”; algo medianamente comprensible si se ve la falta de gas de los pases de Manning a final de la temporada. Como sea, ese bajón y uno de similares proporciones de la defensiva le costaron a los Giants un cierre de 2-5 que los dejo fuera de enero. No se puede criticar a un tipo que tiene dos títulos en 5 años, pero alguna explicación debe haber a semejante descalabro, mas allá del brazo del QB. En cualquier caso, se asume que volverá en plenitud de condiciones y con eso, los Giants son candidatos elementales. El resto de la ofensiva tiene muy pocos retoques. En NY consideran que pueden pelear con lo que tienen ¿Y cómo no creerlo, si tienen 5 temporadas haciéndolo? Ahmad Bradshaw dejo el equipo finalmente este offseason. La responsabilidad absoluta del acarreo desde ahora será del jugador de segundo año David Wilson, cuya temporada de novato puede ser vista desde dos perspectivas: por un lado está el jugador con velocidad y elusividad de élite que promedio 5 yardas por acarreo intentado y le dio una dimensión mucho más explosiva a una ofensiva que Bradshaw mantenía aletargada; por otro lado, el problema esquemático generado por un jugador que es terrible bloqueando en jugadas de pase y no es precisamente un árbol de virtudes cuando de proteger el balón se trata. Esos dos defectos le costaron la titularidad a finales de la temporada pasada, porque si a algo te obliga la ofensiva de Kevin Gilbride, es a bloquear pase consistentemente si eres corredor. Wilson sigue siendo un corredor con capacidad de impacto inmediata, pero no tendrá futuro en esta ofensiva si no puede proteger la espalda de Eli Manning. La encargada de eso, la línea ofensiva, tiene solo un nuevo elemento, el resto regresa y con todo mérito. Will Beatty, el tackle izquierdo se gano una renovación por 5 años con su muy buen 2012 (permitió solo 3 capturas). El elemento nuevo es el tackle derecho novato Justin Pug, un liniero que puede ser tackle o guardia, seleccionado en primera ronda en gran medida por su capacidad atlética, algo que no podía aportar el ahora suplente David Diehl. Por el centro, Chris Snee, David Bass y Kevin Boothe, vienen de una temporada en la que como conjunto solo permitieron 3 capturas. Es una línea estable, al menos mucho mas de lo que era hace un año. En los costados están las principales dudas respecto a esta ofensiva. Hakeem Nicks es el receptor con las mejores manos que hay en NY. El problema es que una serie de lesiones disminuyeron su participación en toda la temporada 2012. Sin él, Victor Cruz sufre contra dobles coberturas o mucha mas atención en la ranura. Los Giants necesitan que Nicks esté totalmente sano (algo que no ha podido lograr en las ultimas 3 temporadas), para tener una ofensiva de pase consistente. La otra opción en esa zona es Reuben Randle, un jugador de segundo año que mostró cosas interesantes, pero aún no tiene la disciplina de cumplimiento de rutas y capacidad de separación para trabajar costados o recibir pases consistentemente en zona media. De Cruz el rendimiento que siempre se espera es explosivo. Es un playmaker con buen uso de las herramientas que tiene. Y uno de los especialistas en la ranura más peligrosos de la liga.
DEFENSIVA
La caída en desgracia de la defensiva fue menos publicitada que la de Manning, pero fue casi tan estrepitosa, especialmente por tratarse de varios miembros prominentes de la defensiva. Quizá al que peor le fue en el conjunto es al esquinero Corey Webster, cuya temporada se caracterizó por ser victimizado consistentemente por los pasadores rivales, especialmente en rutas profundas donde perdía la referencia en cuestión de segundos. Webster, que va a su noveno año en la liga, regresa solo por haber aceptado un recorte importante en su salario. La gerencia espera que logre regresar a forma de 2010-2011, eso es, un esquinero consistente en conceptos de zona cuya capacidad atlética era aprovechada especialmente en los flats. Si Webster sigue en modo 2012, la defensiva sufrirá. El otro esquinero es Prince Amukamara, una selección de primera ronda que ha estado muy lejos de poder cumplir con la expectativa. Con una necesidad casi patológica por marcar con colchones de entre 5 y 8 yardas respecto al receptor, Amukamara sufre al no tener el pedal para retroceder aceleradamente y sus instintos lo dejan en evidencia muchas veces. La zona profunda recibió un terrible golpe con la lesión de ligamentos del safety Stevie Brown, que lo dejara fuera todo el año. Brown era el titular ante la salida del equipo de Kenny Phillips, que no fue renovado por… problemas en las rodillas. A su lado, Antrell Rolle regresa a su cuarta temporada en NY. El coordinador Perry Fewell encontró un uso interesante para Rolle en los frentes nickel y dime, que es asignarle marca en zona alta (cerca de la línea) y luego de cierta progresión de la jugada, permitir que vaya libre al balón. En la caja de los Giants esta el otro bajón importante de la temporada pasada. Por mucho tiempo, Justin Tuck y Osi Umenyiora fueron la cara visible de una de las líneas defensivas mas dominantes del ultimo lustro. Pero las lesiones, en el caso de Tuck, y la edad, en el caso de Umenyiora, redujeron considerablemente su participación en la presión del equipo en la ultimas dos temporadas (Tuck, que promedio 10 capturas entre 2007 y 2010, apeas consiguió 9 en las ultimas 2 temporadas). Ese ha sido el tiempo de Jason Pierre-Paul (JPP) como cara visible de la caja. El problema de 2012 fue que el bajísimo aporte de Umenyiora y Tuck, se sumo a una baja en la producción de JPP. Además, ninguno de los tres entregó ningún tipo de garantías defendiendo el acarreo, algo de lo que se preciaba esta defensiva hasta hace muy poco. Umenyiora se fue a Atlanta y toda la responsabilidad de la presión queda en manos de JPP y Tuck, con la adicion situacional de Mathias Kiwanuka en formaciones nickel y dime. Por el centro, Lival Joseph y el recién firmado Cullen Jenkins añaden buen trabajo contra el acarreo y presión por el centro. Jenkins viene de dos temporadas en el fallido “dream team” de Philly, donde se le vio fuera de lugar como tackle de 4-3 en ocasiones. Los frentes hibridos de Fewell pueden ayudarle a retomar la forma que mostró en 2010 con Green Bay. Los Giants también firmaron a Shaun Rogers como agente libre. Aun esta por verse la contribución que pueda dar luego de estar un año inactivo por lesión. Los apoyadores serán Keith Rivers, Jacquin Williams y el que gane la batalla en los entrenamientos por el spot del centro entre Mike Heirzlich y el recién firmado Dan Connor. Los dos primeros son apoyos medianamente decentes contra el acarreo, pero poco mas. Connor podría apoyar mucho a la secundaria marcando pase si se gana el lugar.
PRONOSTICO: En un ambiente tan parecido al de 2012, nadie puede descartar a un equipo que arranco 7-2 y solo un terrible bache al final (y una remontada época de Washington) los dejo fuera. Eso si, la defensiva luce mucho menos confiable de entrada, que aquella que comenzó la temporada pasada. Menos profundidad en algunos lugares y profundidad de mucha menos calidad probada en otros. La división tiene no tiene un candidato claro, pero en el mix siempre deben estar los Giants. 2dos en la NFC Este.
